Dónde encontrar grandes maridajes en tres restaurantes de estilos diferentes en Buenos Aires
Con una gran gastronomía y buena oferta de vinos para acompañar, repasamos algunas opciones en la ciudad que poco tienen en común, pero donde se puede disfrutar de ambos placeres.
Que la Ciudad de Buenos Aires cuenta con un sinfín de opciones para disfrutar de la gastronomía no es ninguna novedad, pero si lo que buscamos es tener una alternativa donde disfrutar de distintos platos de comida, de buen nivel, y acompañados de un gran vino, la lista empieza a acortarse. Y la cosa se pone aún más complicada si tratamos de combinar diferentes estilos culinarios que vayan en perfecta armonía con la bebida nacional.
Es por eso que en esta oportunidad decidimos repasar tres restaurantes porteños con identidades bien diferentes y ubicados en distintos puntos de la capital donde se puede encontrar gastronomía de buen nivel acompañada por una variada carta de vinos de diferentes regiones del país.
La primera parada la hacemos en el corazón de Villa Crespo, donde desde hace unos meses abrió un sitio que nos lleva a los instintos más primitivos a la hora de comer con su propuesta de cocina en cueva. Se trata de un omakase íntimo donde todo está a la vista, pero que en cada uno de los 14 pasos del menú de estilo Nikkei va revelando secretos y sabores en un armónico maridaje con etiquetas de todo el país y el mundo.

Detrás de una enigmática puerta, el cemento de la ciudad de la furia queda atrás para dar paso a la decoración en forma de roca que transporta directo a una cueva que combina lo rústico con lo lujoso para lograr un ambiente íntimo en cada una de las dos barras donde sendos doce comensales podrán disfrutar de una propuesta inmersiva 360°, donde incluso tendrán la posibilidad de terminar algunos de los pasos con sus propias manos.
En lo que el maridaje respecta, son más de 200 etiquetas de alta gama de bodegas de alrededor del mundo elegidas por el sommelier ejecutivo Pablo Colina que con estilos que van desde lo más clásico hasta lo innovador para formar diferentes estilos de maridajes que van acompañando cada paso de la cena.
La experiencia se puede completar, ya sea al comienzo o al concluir con el menú, con coctelería de autor en el bar ubicado en el entrepiso de la cueva.

Dos clásicos argentinos unidos en la elegancia
Si de clásicos argentinos hablamos, el vino y el asado son una pareja perfecta que desde tiempos inconmensurables conquistan el corazón de propios y ajenos que pisan este país. Aunque quizás sea la combinación más clásica de la gastronomía local, en El Mercado del Faena han logrado elevar la propuesta combinando productos de primera calidad cocinados a horno de barro o las brasas de quebracho colorado con la elegancia y sofisticación que caracteriza al icónico hotel de Puerto Madero creado por Alan Faena.
Con la posibilidad de comer dentro del salón decorado al mejor estilo belle époque-porteño con antigüedades que le dan su propio sello, o en el patio, con una vista directa de los hornos de barro y la parrilla funcionando a pleno, la carta de El Mercado se distingue por clásicos argentinos donde se ve la mano del chef ejecutivo es Emiliano Yulita. Sumado a una trazabilidad de los productos empleados, como cortes de Angus certificados madurados 20 días.
Entre las entradas, aunque clásicos como la molleja de corazón al limón hecha a las brasas, las empanadas al horno de barro o fritas nos llevan directo a lo mejor de los asados dominicales, el pulpo con papas dominó, chimichurri de hierbas frescas y alioli se lleva un párrafo aparte.
Con una larga lista de opciones de cortes de carne, pollo, y pescados a la parrilla para elegir como plato principal, el corte del rey tiene muy bien puesto su nombre. Es que la pestaña de ojo de bife a la leña de casi un kilo, ideal para compartir entre tres personas y en combinación de ensaladas frescas, brinda en boca una terneza digna de la realeza.
En cuanto a los postres, los clásicos vuelven a hacerse presentes, pero una de las más recientes incorporaciones, como la mousse de chocolate 70%, aceite de oliva y sal marina ofrece una sorpresiva combinación para darle un cierre ideal a la experiencia.
A esta altura se podrán preguntar, ¿donde entran los vinos? En todos los pasos y acompañando cada opción de la carta, incluso desde la recepción, donde la comida comienza con un vermut rosso que se presenta como la antesala de un desfile de etiquetas seleccionadas por el equipo de sommellerie que llevan a un viaje sensorial por todo el país y con diferentes varietales para los maridajes. Además, cuentan para elegir por botella una extensa selección de vinos de todo el mundo.
Entre la sorpresa y la pasión
La última opción quizás sea la más sorpresiva de todos. Se trata de Banda, el restaurante de River Plate. Emplazado sobre la tribuna Centenario del Estadio Más Monumental apenas se baja del ascensor que lleva directo al espacio gastronómico millonario, nos topamos con la colección especial de vinos elaborada por Bodegas Bianchi especialmente para el club, con etiquetas como La Máquina, Banda del Alma y Grato Nombre.
Aunque debo confesar que la pasión por la banda puede llegar a nublar la objetividad de la reseña, la calidad de la oferta gastronómica invita a disfrutar de la experiencia, más allá de que si se es hincha de River o no. Aunque no vamos a negar que para los fanáticos del millonario las vistas directas del verde césped que tantas alegrías nos ha dado puede elevar la experiencia a un nivel superior a la de cualquier otro comensal indiferente al blanco y rojo.
En la carta de banda se puede encontrar una amplia selección de platos: desde algunos al mejor estilo bodegón, pasando por fast food con hamburguesas, hasta sushi hecho a la vista de todos a un costado del restaurante. A eso se le suma una coctelería de autor con nombres que rememoran las grandes hazañas de la historia riverplatense.
Respecto a los vinos y el maridaje, la comida puede ser acompañada por una botella de las mencionadas etiquetas de la bodega sanrafaelina o por la selección de más de una docena de marcas de vino más reconocidas de todo el país. También brindan la posibilidad de elegir vino por copa, ya sea blanco o tinto de algunas bodegas seleccionadas.

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