Qué esconde el dato de empleo que el Gobierno muestra orgulloso
La tasa de desempleo bajó en el segundo trimestre del año a 6,2% el nivel más bajo para ese período en ocho años. Pero los desafíos del mercado laboral van por el lado de la demanda y la actualización de los salarios, anticipa un estudio privado.
La buena noticia que supuso el dato de desempleo que ayer difundió el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), marcando un 6,2% para el segundo trimestre y una mejora de 0,7 puntos porcentuales respecto del trimestre anterior, no logra ocultar la realidad de un mercado laboral caracterizado por salarios que corren por detrás de la inflación y demanda de personal poco dinámica.
Al menos es lo que sostiene el estudio GhidiniRodil, especializado en recursos humanos, pese a que la tasa de desocupación registrada en base a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) es la más baja para el segundo trimestre del año desde 2015.
"El mercado laboral está caracterizado por la sistemática pérdida del salario real, siendo que en este 2023 vamos a estar frente al sexto año consecutivo de pérdida del salario versus la inflación", teniendo en cuenta que las estimaciones privadas calculan una inflación que se acerca al 130% anual, y si se proyectan los últimos datos de inflación se puede llegar cómodo al 200%.
"Con respecto a las perspectivas para lo que resta de este 2023, siguen siendo grises y mediocres, dado que la mayoría de los sectores donde se demanda empleo están siendo afectados por la situación económica de recesión y alta inflación", señaló Matías Ghidini, CEO de GhidiniRodil y autor del libro Mi trabajo ahora.
La tendencia
El estudio explica además que se observa un escenario de "sostenido crecimiento del trabajo informal y no registrado" en los últimos años, al que se suma que el desempleo y la demanda laboral "está barranca abajo, en línea con la situación económica del país".
GhidiniRodil también destaca un cambio de tendencia en cuanto a la demanda laboral en especial desde el año pasado. En concreto, advierte que hacia fines de 2021 y principios de 2022 había un importante dinamismo en la demanda, sin embargo, es cambió en la segunda mitad del año pasado.
"En este 2023 las oportunidades de empleo son muy acotadas a sectores muy específicos", destacó el informe. Menciona a la agroindustria, considerando que tras la sequía se observa una recuperación del empleo, así como proyectos de energía, petróleo, y minería.
Hay un sector que venía con buen ritmo en la generación de empleo durante unos 10 años, que es el tecnológico, y que desde hace un año y medio está estancado. Esto se debe al impacto de la economía global y también por decisiones de fondos de inversión.