Plazo fijo: cuánto se gana con la nueva tasa y qué recomiendan los expertos
En tiempos de incertidumbre es la manera más convencional de resguardase contra la inflación que viene. Cómo queda la tasa anual efectiva y cuáles son las alternativas para diversificar en medio de un contexto con final abierto.
La actualización de las tasas del plazo fijo con el objetivo de quitarle presión al dólar ha vuelto a convertir a este tradicional instrumento en una opción interesante. El Banco Central de la República Argentina (BCRA) subió las tasas nominales anuales de 97% a 118%. Al mismo tiempo, realizó una devaluación del peso del 22% lo que implicó signos de preguntas y pérdidas transitorias para los ahorristas.
A partir de ahora, la tasa nominal anual del plazo fijo será de 118% lo que implica una tasa efectiva anual cercana al 200%. Se trata de la ganancia que se obtiene al cabo de un año con renovaciones cada 30 días debido a la acumulación de los intereses de un mes a otro. En este contexto, el plazo fijo se acerca más a la realidad de la inflación que se va a acelerar a partir de la suba del dólar oficial.
Aunque el modo en que terminará el año es una incógnita para la mayoría luego del efecto Milei y el final abierto para octubre o noviembre, por el momento el plazo fijo se presenta como una alternativa para ganarle a la inflación. Al menos durante los primeros meses con el recordatorio de que se trata de una opción de ahorro que vence cada 30 días, con todo lo que puede pasar en el país durante ese lapso.
“Son momentos muy inestables que generan dudas, por lo que es importante saber o tener en cuenta no solo las condiciones de las inversiones sino también las características del inversor”, explicó Mercedes Fernández, licenciada en Administración que asesora financieramente a emprendedores. Agregó que no todos están familiarizados con instrumentos diferentes al plazo fijo y que el contexto actual es un freno más debido a la incertidumbre en danza.
En este sentido, Mauro Formini, contador y asesor financiero, destacó que el plazo fijo es una de las opciones tradicionales de inversión. Por este motivo, con la actualización de tasas recupera su atractivo al menos durante un tiempo debido a que se encuentra dentro de lo que sucede en la realidad inflacionaria actual.
Cómo ganarle a la inflación
Es probable que un ámbito revuelto, faltantes de dólares y devaluación, el Gobierno logre, con la nueva tasa, su objetivo de incentivar ahorros en pesos. No obstante, es cierto que los que tenían ya formado el plazo fijo van a perder en comparación con los que se hagan a partir del martes hasta que lo puedan renovar al tiempo que vieron desde afuera la devaluación del lunes.
En este marco, en palabras de Formini, los instrumentos en pesos ya sea atados a la inflación por bonos CER o al movimiento del dólar MEP son y han sido opciones que han podido ganarle al aumento de precios. Así, este tipo de Fondos Comunes de Inversión (FCI) _que en general también se han actualizado a la nueva tasa_ son una manera de preservar los pesos sin tener que esperar 30 días para disponer del dinero.
Aunque la tasa del plazo fijo es muy conveniente, desde el punto de vista de Fernández lo ideal sería diversificar con el objetivo de no solo invertir mejor sino, sobre todo, de ganar tranquilidad en medio de un entorno complejo. En especial para perfiles conservadores que prefieren la seguridad del banco y el dinero a plazo.
En coincidencia con Formini, la especialista observó que los FCI acompañan en general la tasa del plazo fijo. La posibilidad de acceder de manera casi inmediata a los ahorros hace que la tasa de los Fondos money market sean un tanto menores. “También están los Cedears para protegerse de las variaciones del tipo de cambio, que es una forma de invertir en pesos en acciones de empresas extranjeras”, detalló Fernández.
Otra alternativa es comprar dólar MEP para luego utilizarlo en Obligaciones Negociables. A sabiendas de que el plazo fijo es una manera conocida de inversión, los especialistas animan a los ahorristas a abrirse a otras posibilidades que también son seguras. La diversificación, además, es una manera de cubrirse mejor en momentos álgidos como el actual.