Costo de vida: las empresas se adelantan y ofrecen más promociones
Los aumentos de 50% en diversos productos y servicios no solo golpean a los consumidores, sino también a las empresas que ven cómo sus clientes se van. Estrategias para no morir con el ajuste.
El ajuste llegó hace rato y, aunque todavía no llegó el impuestazo que anticipan las tarifas de servicios públicos, lo cierto es que el impacto es tanto hacia los consumidores como hacia las empresas. La mayoría de las pymes y comercios se desempeñan en el mercado local y – en el poco tiempo que llevan las actualizaciones - las compañías han comenzado a ver cómo sus clientes se van o se abstienen.
Ese fue uno de los motivos por los que los supermercados comenzaron a ofrecer desde este miércoles una canasta con “precios diferenciados”. Integrada por productos básicos y con el objetivo de tener una alternativa más económica, las grandes superficies deben vender para sobrevivir y –regulaciones más o menos- de eso se trata su negocio.
Debido a la estrepitosa caída que evidencia el mercado interno y que se profundizará luego de las Fiestas, comienza la pelea por quedarse con la porción de la torta que sobrevive. Por caso, la venta de comercios minoristas medida por la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa (CAME) cayó en Navidad 2,8%. Y no solo es un tema de comercios o supermercados, sino también de empresas de internet, televisión por cable y celulares que ya han comenzado a adelantar promociones para evitar fugas que ya comenzaron o anticipan para enero.
Aunque hoy internet y celulares son un servicio casi esencial y que han estado entre las pocas favorecidas por tema precios, lo cierto es que la competencia es alta – en especial en las zonas donde nuevas empresas llegan con la fibra óptica. En el rubro internet la diferencia de tarifas es alta y se pueden conseguir valores mensuales desde $4.000 hasta más de $11.000. Claramente la calidad de los servicios no es la misma y también es probable que no se respete el valor de la promoción inicial debido a la inflación, pero lo cierto es que el bolsillo manda.
Algo similar sucede con los celulares, un mercado concentrado, pero con alta competencia por los precios. Ahora, la diferencia es que no solo son las otras empresas las que tientan al consumidor con ofertas, sino que las propias (las que cada uno tiene contratadas) son las que se anticipan a congelar el precio. Incluso, son ellas mismas las que proponen el clásico "rulo" argentino de volver a llamar dentro de un par de meses para re-pactar la promoción por dos o tres períodos más.
“Vemos que la mayoría de las empresas se anticipan a la recesión fuerte que ya se siente y se va a profundizar”, contó el economista de la consultora Evaluecon, José Vargas. En este marco relató que no solo se hacen promociones generalizadas sino también segmentadas, es decir que analizan cliente por cliente. “Es el caso de la telefonía celular, internet y cable, donde se evalúan los mercados de manera geográfica, la capacidad generalizada de pago y la competencia en danza”, precisó Vargas.
Objetivo: vender
La caída en el poder de compra se ha visto atemperada en diciembre por el impulso que traen las Fiestas, así como por la llegada del aguinaldo que alivió las cuentas bancarias de los asalariados formales. Sin embargo, los comercios ya han comenzado a registrar la baja. Esto, por un lado, ha hecho retroceder algunos precios y, por el otro, ha incentivado a establecer estrategias diversas para sostener las ventas.
A eso se debe la canasta de productos de los supermercados – que han comenzado a anunciar aumentos de hasta 100% en las nuevas listas de precios - así como en la readecuación de los precios de la carne que registró una merma del 10%. En este caso, según explicó José Rizzo, presidente de la Cámara de Matarifes y Abastecedores de Carne de Mendoza, las carnicerías han salido a hacer promociones y ya se ha comenzado a sentir una baja en los valores de algunos cortes.
El motivo básico es, según Rizzo, que la “demanda no ha validado los precios” y por eso han bajado. No obstante, los valores seguirán altos en comparación con los que había hasta los primeros días de diciembre. Con la mirada puesta en enero y en lo que viene, el economista José Vargas explicó que la mayoría de las familias buscará semana a semana cubrir las necesidades mínimas, algo que van a hacer con mayor fuerza a partir de enero. “El resto de los consumos van a bajar con seguridad porque va a caer fuerte el poder de compra”, anticipó Vargas.