El dato clave del consumo ante la expectativa de una devaluación
Ante la perspectivas de una devaluación, los consumidores buscaron defender su poder adquisitivo. El uso de las tarjetas de crédito se movió a ese ritmo.
La aceleración de la inflación, la inestabilidad cambiaria y las expectativas económicas que genera la llegada de Javier Milei activaron los reflejos de los consumidores. En los últimos días se vivió en muchos comercios una mayor demanda por parte de un público que buscó adelantar compra para cubrirse de futuros aumentos como también para desprenderse de pesos.
Una de las herramientas utilizadas para esto tiene que ver con el uso de las tarjetas de crédito que tuvieron en noviembre un comportamiento particular. El mes pasado se realizaron operaciones con tarjetas de crédito por $5.036.456 millones, lo cual significa una suba de un 8,9% nominal respecto al cierre del mes pasado, y por debajo de los valores de la inflación esperada para este período.
Así lo explica un informe de First Capital Group que señala que el crecimiento interanual del uso de los 'plásticos', llegó al 144,4%, quedando también por debajo de los niveles de la inflación estimada del año, arrojando en consecuencia una baja en términos reales.
“A pesar del fomento de los programas 'Ahora 12' y similares, así como los límites impuestos a las tasas activas de interés que se aplican a los saldos de los resúmenes que se financian, estamos en presencia de un mes con caída de los saldos financiados”, explicó Guillermo Barbero, Socio de First Capital Group.
En cuanto al consumo en dólares, las tarjetas de crédito registraron una suba interanual del 76,3%, aunque con un comportamiento mensual irregular alternando alzas y bajas, dice el trabajo. En noviembre hubo un aumento del 38,9% respecto al mes anterior, mientras que las compras con tarjetas de crédito en dólares ascendieron a US$425 millones.
“Las distorsiones que se crean en el tipo de cambio aplicable a las operaciones con tarjetas, impulsaron las compras justo cuando más se precisan los dólares para el sector productivo y para el sector de la salud en el mercado interno. La expectativa de una corrección del tipo de cambio, también colaboró en acelerar consumos, paradojas que crean las exageradas regulaciones”, finalizó Barbero.