Mucha “platita” pero pocos votos para un oficialismo en retirada
El dirigente político presidente de Aptitud Renovadora y especialista en políticas públicas de empleo, analiza la derrota del oficialismo y su fracaso de llenar la calle de plata.
El plan platita del gobierno nacional de salida y los pesos repartidos de forma pornográfica no tuvieron el efecto esperado por Sergio Massa en el balotaje. El anterior “plan platita” nos remonta al año 2021 donde el gobierno vivió una derrota en las elecciones PASO de aquel momento que derivó en la decisión oficial de expandir el gasto público a niveles astrales en pos de intentar revertir el magro resultado electoral de aquellas elecciones PASO.
Hoy la inflación se ha multiplicado por 5, al menos en lo que registró la última medición del Indec en materia inflacionaria
La ciudadanía, dentro de su hartazgo de los políticos de siempre, no tuvo reacción frente a la campaña mas sucia y millonaria de los últimas décadas. Bono para jubilados, aumentos de los planes sociales, prestamos de Anses, campaña del miedo, entre otras no tuvo el efecto esperado por un oficialismo que se le acabaron las ideas y los recursos de un Estado en situación famélica.
El dato de inflación de septiembre, de 12,7%, un octubre dudoso con 8.3% y un, 145.7% interanual, reflejó lo que ya estaban sintiendo los bolsillos a los que ahora se busco llenar de “platita”, con una distribución, por cierto, bastante obscena y, a las claras ningún político, Maxime, ministro de economía con ese índice resiste una elección y sale victorioso.
La regla económica que inyectar de plata la calle no es sinónimo de estabilidad no fue entendida por Sergio Massa y su gran equipo. El factor “inversión” no estuvo en la agenda del ministro y la llenada de los bolsillos de manera imaginaria no le resulto favorable. El "plan platita" se dio en un pésimo contexto de muy alta inflación y, si se financia con mayor emisión, esto genera temores y hoy lo vemos, en un incremento mayor de los precios que se disparan.
El congelamiento de precios llegará sobre todo a los supermercados pero que será casi imposible de cumplir en los pequeños almacenes. En otras palabras, que los presuntos beneficios serán para la clase media pero no para los sectores en situación de pobreza. Otro tema es el marco normativo que nos espera en el 2024, donde, con la actual argentina no crece. Las medidas del gobierno saliente y el plan platita, a las claras, fueron medidas cortoplacistas.
Medidas de impacto para obtener un resultado que no sucedió, pero si provoca y va a provocar el derrumbe de la estabilidad macro y microeconómica de nuestro país. Otras medidas, como algunas de las que alcanzan a monotributistas y autónomos, suponen la
prórroga por unos meses del pago de obligaciones con el fisco. Eso generará formalmente una deuda que, el próximo año deberán enfrentar los independientes tributarios.
El futuro de esas y de otras medidas anunciadas por un gobierno de salida dependerán, en alguna medida, de las decisiones de la próxima gestión, a la cual, seguimos con la pesada herencia. El "Plan Platita" genero un efecto inverso al buscado, al fomentar la inflación sin que la mejora real en el ingreso pueda llegar a los más pobres
El fracaso de años de gestión no se puede resolver con medidas electoralistas cortoplacistas cargadas de populismo. La inflación y la destrucción del poder de compra son la consecuencia de un gobierno sofocado por su propia mala praxis.
* Juan Pablo Chiesa es abogado especializado en Empleo y Políticas Públicas, escritor, docente y presidente de Aptitud Renovadora. Suscribite a mi canal en Youtube haciendo click aquí. Twitter: @Juanchiesaok