El éxito de una pyme en pandemia: duplicó el empleo y aumentó la facturación
Una pyme santafecina encaró un profundo proceso de reconversión de sus estructuras y en lo que va del 2021 logró duplicar la cantidad de empleados, aumentar la facturación y ampliar sus instalaciones.
En contraste con la dramática situación que viven miles de pequeñas y medianas empresas en todo el país por el negativo impacto de la pandemia de coronavirus en la economía, una pyme santafecina encaró un profundo proceso de reconversión de sus estructuras y en lo que va del 2021 logró duplicar la cantidad de empleados, aumentar la facturación y ampliar sus instalaciones.
Se trata de Valenziana, una empresa fabricante de muebles instalada en las cercanías del pueblo Uranga, en el departamento Rosario de la provincia de Santa Fe. "Arrancamos la pandemia con cien empleados y hoy tenemos 210", indicó Rodrigo Diaz, uno de los socios de esta pyme que cerró 2020 con $800 millones de facturación y estima este año alcanzar la meta de los $1.000 millones.
"Marzo de 2020 fue un mes muy preocupante por la imposibilidad de producir y especialmente por la incertidumbre, no sabíamos qué iba a pasar", expresó Díaz.
Hoy, también están a la espera de las decisiones del municipio para los próximos días en materia de aislamiento, ya que la mayoría de los trabajadores viven en Uranga o en localidades cercanas. Solo el equipo comercial mantiene desde abril del año pasado la modalidad de teletrabajo, el resto concurre a las instalaciones a las que llegan en bicicleta o autos particulares.
"El año pasado encaramos una transformación de las estructuras, fortalecimos la modalidad de comercio electrónico y la mayoría de los nuevos empleos fueron para las áreas productivas y de atención al cliente", indicó.
Entre los productos fabricados el año pasado, la empresa diseño un "ropero sanitizante" pensado para quienes siendo trabajadores esenciales llegan al hogar y necesitan desinfectar la ropa. "Nos fue muy bien con la venta del ropero, pero en general con todos los productos", aclaró Diaz.
En Uranga viven unas 900 personas y registraron un centenar de infectados con coronavirus.
La previsión para este año es "avanzar en los locales propios en diferentes provincias del país, y tenemos un ambicioso plan de inversión: vamos a aumentar 50% los metros cuadrados de la planta de producción", sostuvo.
También esperan poder internacionalizar los productos con planes demorados por pandemia para Uruguay y Paraguay. A finales de 2018 la empresa había iniciado un plan de internalización con "exportaciones simbólicas a distintos países", entre los cuales figuraban Colombia. Chile y Perú, entre otros. "Después por la forma de trabajo de ese momento y por los vaivenes de la economía quedamos fuera del mercado" exterior, aclaró.