El FMI consultó por las reservas, la brecha cambiaria y las exportaciones

Tras cinco días de reuniones, los representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI) regresaron a Estados Unidos luego de evaluar el ambiente político para una refinanciación de USD 45.000 millones que Argentina debe comenzar a cancelar en septiembre de 2021.

La visita tuvo carácter excepcional y, a pedido del gobierno, la directora del Fondo, Kristalina Georgieva, envió la misión para saber a qué tipo de acuerdo está dispuesto a llegar el gobierno y evaluar el terreno político y consenso que puede haber para el mismo.

Es por esto que los representantes del FMI se reunieron con empresarios, sindicalistas, dirigentes sociales y economistas, a quienes recibieron en reuniones separadas.

El formato de los 21 acuerdos que Argentina tuvo con el Fondo, que es el stand-by, parece improbable porque son acuerdos a corto plazo, según señaló la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca. Es por ello que el país busca un “buen acuerdo” que de “tiempo para crecer achicando el déficit fiscal”, comentó. Según los especialistas, esto quiere decir que buscan un “Acuerdo  de Facilidades Extendidas” que incluyen condiciones no solo fiscales. “Quizá podamos ponernos de acuerdo en esas condicionalidades que el FMI suele pedir o el organismo a lo mejor esté pensando en negociar algo distinto, no lo sabemos todavía”, agregó Todesca en una nota con diario Clarín.

Según uno de los presentes en las reuniones con referentes fuera del ámbito gubernamental: "fue un intercambio informal, preguntaron mucho sobre las reservas y el tipo de cambio; no vinieron en misión negociadora, sino a recoger visiones. Los vi colaborativos con la Argentina y esperando que la Argentina decida qué quiere hacer”.

Mientras el gobierno espera una nueva misión técnica que permita un acuerdo para aplicar desde noviembre, cabe aclarar que la misión fue un gesto por parte de Georgieva, ya que hace meses que el FMI no envía especialistas a ningún país y realiza negociaciones virtuales.

Hoy Argentina representa el 32,6% de la cartera de préstamos del Fondo, siendo el principal deudor, seguido por Ucrania.

Las preguntas más reiteradas, según los que estuvieron en las reuniones, tuvieron que ver con la cuestión cambiaria, las reservas del BCRA y la posibilidad de dar un “salto exportador”.

Por su parte, el presidente Alberto Fernández declaró hoy que un eventual acuerdo con el Fondo no busca desembolsos de dinero sino ordenar los mercados.

El problema que tiene  Argentina es su bajo nivel de credibilidad, expresado en el aumento del riesgo país de las últimas semanas y que va de la mano con la caída de las reservas del BCRA, la escalada del dólar y la brecha cambiaria.

Fuente: Infobae