El extraño caso del hijo de Marcelo Gallardo, refuerzo de Independiente Rivadavia

El revuelo que generó la presencia de Marcelo Gallardo en el Bautista Gargantini tenía un claro motivo que mucho no sabían: su hijo Nahuel es uno de los refuerzos de Independiente Rivadavia para esta Liga Profesional. El lateral izquierdo llegó en silencio al club del Parque y todavía sigue en ese mood. Por ahora no ha tenido su debut y su cronómetro personal está en cero, algo que se ha repetido a lo largo de su carrera.

El lateral izquierdo debutó de la mano de su papá en River Plate en la temporada 2017, en un doloroso estreno con derrota 4-0 ante Talleres de Córdoba por Superliga. Si bien completó todo el encuentro, el defensor no volvió a jugar ese año y tampoco fue al banco de suplentes nuevamente. Así, cerró el certamen con solo 90 minutos.

El año siguiente la cuenta se ensanchó un poco, llegando a disputar cuatro partidos (solo uno de titular) y un acumulado de 257 minutos totales. Alternó mucho más en el banco de suplentes (13 oportunidades) pero tampoco pudo ganarse un lugar como pieza de recambio para un equipo que volaba dentro de la cancha y que tenía en la competencia del puesto de lateral zurdo a Fabrizio Angileri y a Milton Casco.

Consensuado familiarmente, Gallardo decidió salir a préstamo para poder tener rodaje y experiencia lejos de casa. El Defensa y Justicia de Hernán Crespo le abrió las puertas y empezó a ampliar su caudal de tiempo en cancha. Jugó mucho en la Copa Maradona pero no pudo hacerlo en la Copa Sudamericana, en aquél equipo que tenía doble competencia y que terminó siendo campeón continental. En ese torneo solo jugó 9 minutos pero sumó una copa para su vitrina.

Tras su paso por el Halcón (18 partidos) siguió el periplo de préstamos con un denominador común: nunca superó los 20 encuentros en ninguno de sus equipos. El defensor disputó 17 encuentros en Once Caldas de Colombia, 16 en Colón de Santa Fe y otros 10 en Sarmiento de Junín, sin goles oficiales ni asistencias.

Por ahora, en Independiente Rivadavia tampoco ha tenido rodaje. Llegó tras la salida de Emmanuel Más para tener una opción más en el lateral izquierdo, pero por ahora, el nivel de Ostchega no le ha dado chance. Suplente en cuatro de los cinco partidos de la Lepra (con Atlético de Tucumán ni siquiera fue al banco), el Muñequito espera su chance de poder mostrarse ante los ojos de Cicotello, chance que por ahora, se hace esperar.