Los “detalles” que llevaron al PSG de las estrellas a una impensada caída
Ausencias, lesiones, críticas, reproches, puntos perdidos y una consecución de eventos que pusieron al equipo francés en medio de una tormenta difícil de atravesar.
El juego del fútbol tiene tres resultados. Se puede ganar, empatar o perder. Eso, según el reglamento. Para algunos clubes, sin embargo, la cosa no es tan fácil. Muchas veces, el status de un club, la calidad de sus jugadores y su entrenador, la cantidad de hinchas, los títulos ganados y últimamente sobre todo, el dinero invertido en una estructura futbolística sólida, convierten a un equipo en Deportivo Ganar. En eso se ha transformado, entre otros, el Paris Saint-Germain.
El trío de estrellas conformado por Lionel Messi, Kylian Mbappé y Neymar Jr. es una de las razones por las que todo el planeta fútbol ve en el PSG una máquina capaz de ganar cualquier torneo, incluso la ansiadísima Champions League, que justamente nunca tocó las vitrinas del equipo parisino. El impresionante terceto ofensivo, sumado a la constelación de menor nivel, pero de gran nivel al fin, que los rodea, deberían bastar para ganar, ganar y ganar en el equipo de Christophe Galtier.
Sin embargo, esto no ha sucedido en la temporada 2021-2022, con un Messi que no terminaba de engranar en cuanto a números, y cuando parecía que la 2022-2023 iba a ser la ideal, el comienzo de este año da señales importantes de alarma y de un posible y estrepitoso fracaso.
Los números fríos indican que, tras 23 partidos de la Ligue 1, PSG se encuentra primero con cinco puntos de ventaja sobre Olympique de Marsella, a falta de 15 encuentros para el final del torneo y con la posibilidad clara de levantar el trofeo a mitad de año. Mbappé, con 13 goles, es el máximo anotador del equipo y está apenas a dos de los 15 de Folarin Balogun, líder estadístico en el rubro. Messi y Neymar aparecen en el tope de la lista de asistidores con 10 cada uno.
¿Y por qué hay tanto problema en el club francés? Hagamos un repaso. El comienzo de la temporada fue ultra auspicioso, con 21 goles en los primeros cuatro partidos, goleada tras goleada y con un funcionamiento espectacular. Parecía que esta temporada, por fin, se conseguiría el objetivo máximo de la Champions o, por lo menos, se competiría como el candidato más importante a quedarse con la Orejona.
Un hecho absolutamente llamativo es que, tras 24 partidos en el segundo semestre de 2022, el PSG jamás perdió. Si bien algunos equipos lograron sostenerse y arañar algún empate ante el furioso ataque parisino, era difícil convertirle y más aún ganarle. Como dato está que, incluso cuando Troyes les marcó tres tantos a fines de octubre, los de Christophe Galtier lograron ganar 4 a 3. Luego, solo recibió como máximo dos goles, por parte de Montpellier y Maccabi Haifa, y también ganó ambos partidos. Luego, la única forma de impedir un triunfo del PSG fue defenderse bien.
Por alguna lesión, el trío MNM no participó en todos los encuentros, y a veces no conectó tan bien como en algunas ocasiones. Y cuando llegó y finalizó el inusual parate mundialista en diciembre, comenzaron los problemas. Porque a la vuelta, el Messi campeón del mundo siguió en unas merecidas vacaciones hasta pasado el 1° de enero, y cuando regresó Leo fue Mbappé quien ligó un viajecito.
Y 2023 llegó como un balde de agua helada en el frío invierno francés: el 1° de enero, sin Messi y sin Ney, PSG cayó 3 a 1 ante Lens. Comienzo por demás negativo, porque era la primera derrota de la temporada y porque el equipo no tuvo casi funcionamiento, acusando las ausencias más importantes en ataque. Lo que no se puede perder de vista es que igualmente Galtier contó con la mayoría de sus habituales titulares.
Si se cuenta ese partido y hasta mediados de febrero, el equipo francés jugó 11 encuentros y perdió cinco, tres de ellos seguidos. No solo eso, entre ausencias de Neymar, Mbappé y Messi cambió varias veces de esquema y de nombres y apenas dos veces se quedó con el arco en cero.
¿Le encontraron la vuelta a la táctica del PSG? Por un lado, sí, los rivales analizaron movimientos y resolvieron de mejor manera la forma de atacarlo. Por el otro, el rendimiento individual y colectivo decayó, tanto que el propio entrenador aseguró que había "demasiados jugadores" que no estaban a la altura. Hubo eliminación en la Copa de Francia ante Marsella y un record de tres derrotas consecutivas que no se daba ¡desde 2011!
Claro, también se perdió en la ida de los octavos de final de la Champions League ante Bayern Munich, 1 a 0, con la posibilidad de revertirlo en dos semanas en Munich. Pero, alarmantemente, el bajón llegó en el momento más delicado de la temporada, donde ganar es imperativo para mantenerse en carrera por los objetivos.
A las puertas de otro fracaso, que sería tal debido a los cientos de millones invertidos en el plantel, hay varios detalles que llevaron a este desgaste y que arman una lista casi sin fin. El primero es que el vestuario parece dividido después de algunos roces entre Neymar y Mbappé. Lo segundo es que, después del Mundial, los futbolistas bajaron su nivel individual.
Luego es posible mencionar las críticas de los medios (L'Equipe volvió a ponerle un insólito 3 de calificación a Messi ante el Bayern), la presión de los hinchas que demandaron respuestas tras la caída ante Monaco y el armado del plantel por parte de Luis Campos, asesor deportivo del club. El portugués, quien llegó para esta temporada para evaluar posibles opciones de refuerzos, criticó duramente al equipo internamente y luego Neymar confirmó una discusión en el vestuario. El club, así, es una bomba a punto de estallar.
Encima, el armado del plantel no deja contento al técnico Galtier, quien demandó refuerzos pero no los tuvo. A principios de temporada llegaron Fabián Ruiz, Carlos Soler, Renato Sanches, Vitinha, Nordi Mukiele y Hugo Ekitiké. Y, si bien el rendimiento de los recién arribados no fue espectacular, el rendimiento excelso de Messi, Neymar y Mbappé ocultó las fallas. Cuando bajaron el nivel o faltaron los más importantes, desde el banco de suplentes no hubo una respuesta que estuviera a la altura: ni del técnico para resolver tácticamente ni desde los intérpretes para darle algo de frescura al equipo.
Ahora, después de tres derrotas en fila y con la posibilidad de caer al abismo nuevamente en octavos de final en la Champions League ante un rival temible como Bayern Munich, los medios franceses relatan que la posición de Galtier como entrenador ya tambalea: "La directiva del club no aguantaría otro cachetazo. Los siguientes partidos del PSG ante Lille y Olympique de Marsella serán observados de cerca", aseguró Le Parisien. ¿Habrá reacción del equipo o se viene una nueva tormenta en París?