Quedó en la historia: el sorteo del Mundial que Argentina fue cabeza de serie pero no lo jugó
Este viernes en Qatar se producirá un hecho que no se da desde Francia 1938: un sorteo con las Eliminatorias sin concluir. Pero aquella vez hubo más episodios insólitos que involucran a la Selección argentina y que la historia parecía sepultar. MDZ los desterró de los archivos.
Tenía solo 6 años Yves cuando le tocó hacerse cargo del sorteo del Mundial. Su abuelo, don Jules Rimet, creador de la Copa del Mundo y presidente de la FIFA por ese entonces, había decidido que su nieto fuera el centro de atención esa tarde en el Salon d’Horloge del Ministerio de Asuntos Exteriores en París. Vestido con camisa y corbata, pullover y pantalón corto al tono, el niño se subió al escritorio y fue el encargado de sacar de dos jarrones traslúcidos los papelitos de las 16 selecciones que iban a jugar en Francia 1938. Iban, porque entre aquel 5 de marzo de 1938 y el partido inaugural del 4 de junio pasaron cosas: ¿sabía usted que Argentina fue parte de ese sorteo como cabeza de serie, pese a que luego decidió no jugarlo?
Todo comenzó cuando Argentina presentó su candidatura para organizar el Mundial de 1938. Tras Uruguay 1930 e Italia 1934, se pretendía el retorno de la copa a suelo americano. Los competidores eran Francia y Alemania, pero tras una visita oficial de Jules Rimet a Buenos Aires, el presidente la FIFA les endulzó los oídos a los dirigentes de la AFA: la Copa del Mundo tenía grandes chances de realizarse en territorio nacional según palabras del mandamás francés. Espejitos de colores.
En Europa, claro está, tenían otros planes. Los dirigentes galos Hénri Delaunay, creador de la Eurocopa, y Robert Guérin, primer presidente de la FIFA, hicieron campaña para que el Mundial se jugara en Francia, cometido que consiguieron durante un congreso en plenos Juegos Olímpicos de Berlín en 1936.
La AFA puso el grito en el cielo y fue por el premio consuelo: jugar el Mundial sin pasar por las Eliminatorias, con un fundamento muy de la época: el nivel deportivo de la Selección no ameritaba a tener que medirse con otros rivales para acudir a la máxima cita del fútbol. Otra vez la FIFA amagó con un sí pero respondió con un estruendoso no.
Así las cosas, a la Argentina no le quedaba otra que medirse ante el ganador de un triangular en Centroamérica a disputarse en La Habana, Cuba, entre el local, Costa Rica y Guayana Neerlandesa. Y si bien la AFA no terminaba de aceptar el convite, en medio de las negociaciones llegó la fecha del sorteo y la FIFA tomó una insólita decisión que el tiempo pareció sepultar, pero que MDZ logró desterrar de los archivos.
El insólito sorteo del Mundial de Francia 1938
Como sucederá este viernes en el Centro de Exposiciones y Congresos de Doha, aquel sorteo del Mundial 1938 se realizó con más de un clasificado sin definirse. En Qatar serán tres los lugares pendientes. En Francia fueron cuatro. Pero con una particularidad mayor: como aquella copa con 16 selecciones se jugó comenzando directamente por los octavos de final, había que definir ocho cabezas de serie (los mejores equipos) para un primer bombo y los restantes ocho equipos irían al segundo copón. Y pese a que la Argentina no tenía garantizado su lugar, se dio por hecho que iba a superar al rival centroamericano, por lo que se la ubicó como cabeza de serie. Lo mismo pasó con Checoslovaquia y Hungría, quienes aún tenían que sellar su pasaje al Mundial.
La mano derecha del pequeño Yves determinó que Argentina (o el impensado clasificado centroamericano) jugaría el 5 de junio ante Rumania en Toulouse. Pero Antonio Sastre, Vicente de la Mata, el Charro Moreno, Pancho Varallo, Peucelle, Bernabé Ferreyra, Lazzatti, el Chueco García, Pedernera, Cherro, Guaita, Minella y demás cracks del fútbol argentinos por esos años se quedaron sin Copa del Mundo: los clubes se pusieron firmes en no cederlos y la AFA anunció que no participaría de ningún partido eliminatorio. Chau Mundial.
En la portada de la edición del lunes 14 de marzo de 1938 del periódico español El Mundo Deportivo, que por ese entonces salía semanalmente y cuyo slogan -atento a los tiempos que corrían- era "Diario de Deportes y de Guerra", se refleja el resultado del sorteo, con Argentina o el ganador del triangular de Centroamérica ante Rumania. Finalmente no hubo triangular porque Costa Rica y Guayana Neerlandesa se bajaron de la competencia, y Cuba quedó clasificado para medirse ante Argentina el 29 de mayo en Burdeos, días antes del comienzo del Mundial. Quedó dicho: la Argentina declinó su participación y Cuba tuvo su única aparición en una Copa del Mundo, que fue por demás histórica: empató 3-3 con Rumania tras el tiempo suplementario, y como no existían los penales para dirimir al clasificado a cuartos de final, cuatro días después se jugó el desempate: fue 2-1 para los cubanos, que en la siguiente fase cayeron por 8-0 ante Suecia.
Aquel periódico español que reflejaba el resultado del sorteo también tenía en su tapa un apartado para la situación del equipo argentino: "La participación de Argentina se complica", rezaba el título. "Los franceses, que pusieron todo su empeño para lograr la participación del equipo nacional de la Argentina y que parecían haberlo logrado, con la anuencia del Comité Organizador y de la misma FIFA que se puso por montera plazos de inscripción reglamentarios y demás zarandejas protocolarias, se ven ahora inquietados por las noticias que llegan de la Argentina y que hacen todavía dudosa su participación en este torneo", informaba en el texto.
"Parece ser que los clubes profesionales han acordado por unanimidad aconsejar la no participación de Argentina en la Copa del Mundo. El caso es que estos clubes han acordado nombrar una ponencia que estudie la eventualidad de esta 'participación', que los federativos habían creído que era firme y que por lo visto no lo es ni mucho menos", agregaba la noticia. Y cerraba: "Argentina, que ya mandó a Italia (segunda Copa del Mundo), un equipo representativo indigno de su prestigio futbolístico, parece que acabará por hacer lo mismo en la tercera Copa del Mundo, que los franceses quieren hacer grande y que mucho han de esforzarse todavía para que lo sea".
Las otras particularidades de aquel sorteo del Mundial
Si bien Austria y Alemania participaron del sorteo del 5 de marzo de 1938 como dos países separados, una semana después, el 12 de marzo, la Alemania de Hitler anexionó a Austria, parte del preludio de la Segunda Guerra Mundial, por lo que disputaron el Mundial unificadas. Suecia, que debía enfrentarse a Austria, pasó directamente a los cuartos de final.
Estados Unidos, que debía jugar ante Indias Orientales Neerlandesas el 26 de mayo en Rotterdam para definir un lugar en el Mundial, se retiró en el mes de abril. Hungría goleó 6-0 a la hoy Indonesia en los octavos de final, eliminó a Suiza en cuartos, a Suecia en las semis y llegó hasta la final de la Copa del Mundo de Francia 1938: cayó 4-2 ante una Italia que había salido a jugar con un claro mensaje del dictador fascista Benito Mussolini: "Vencer o morir".