La desesperación de Koeman intranquiliza al Barcelona

Ronald Koeman pasó un berrinche en el banquillo local del Camp Nou. El entrenador azulgrana alineó un equipo de garantías pese a las bajas del Dinamo de Kiev, aunque con una sorpresa en la defensa con la presencia en el eje de De Jong en lugar de un Lenglet que se quedó con los suplentes. Además, el partido empezó bien con el gol de Messi de penalti y un tiro al larguero de Pedri, con lo que parecía que la superioridad culé se iba a hacer patente de cabo a rabo del encuentro.

Sin embargo, tras el 1-0 el Dinamo estiró sus líneas, se fue hacia delante, superó con suficiencia la presión del Barça y generó varias ocasiones que, por fortuna para los azulgrana, Ter Stegen conjuró con solvencia.

Las cámaras de televisión siguieron a Koeman durante el encuentro y las imágenes que dejó fueron elocuentes del mal rato que pasó ante los ucranianos. El entrenador se quejó de forma elocuente hablando con su ayudante, Schreuder. Se desesperó, hablando hacia el campo dando órdenes a sus jugadores de forma vehemente. Renegó cuando al inicio de la segunda parte el Dinamo ya generó un par de llegadas claras ante Ter Stegen. Y en algún momento se quedó cabizbajo, mirando hacia el suelo. Ya en el partido del pasado sábado, ante el Alavés en Vitoria, se vio a un Koeman enfadado y, al final del partido, hastiado en el banquillo por la falta de eficacia de sus jugadores en ataque. Ante el Dinamo se le vio ‘quemado’ por las ocasiones que tuvo el rival, concedidas por su equipo.