Pobreza a la baja: la buena noticia que le trae importantes desafíos a Javier Milei
Javier Milei tuvo un informe favorable de pobreza que avala parte de sus políticas, pero necesita actualizar la medición y de sostener los buenos resultados.

La pobreza se mantiene a la baja en medio de la fragilidad económica.
ALF PONCE MERCADO / MDZA pesar del informe de pobreza que emitió el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en el cual el Gobierno de Javier Milei recibió una buena noticia por la marcada tendencia a la baja desde su asunción, debe enfrentar el desafío de generar una nueva medición que se adecue mejor a la actualidad, aunque los números puedan ser más altos.
El Indec informó que en el primer semestre de 2025 la pobreza alcanzó a 31,6% de la población, mientras que la indigencia estuvo en el valor del 6,9%. Estos números muestran una nueva baja de con respecto al segundo semestre de 2024 y mucho más que la "heredada" del primer semestre de 2024, marcando una clara tendencia a la baja en uno de los principales índices económico-sociales para el país.
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Los números de pobreza de Alberto Fernández
Alberto Fernández dejó la presidencia en diciembre de 2023 con un tendal de pobreza alarmante. Las cifras de la última gestión "nacional y popular" dejaron al país con una pobreza del 41,7% y la indigencia en el 11,9%. Esto quiere decir que al menos 19.200.641 personas estaban por debajo de la línea de pobreza, de las cuales 5.479.319 eran indigentes, según indicó el informe del segundo semestre 2023 publicado en marzo de 2024 por el Indec.
Seis meses más tarde, cuando la motosierra se manejó a sus anchas por el país con la mecánica del ajuste, que en parte sirvió para desactivar la bomba económica de la gestión kirchnerista, la pobreza estaba en 52,9% y la indigencia en 18,1%. Esto se traduce en 24.357.647 pobres, de los cuales 8.334.091 eran indigentes. A pesar de esa herencia que dejó el sistema económico inflacionario que llevó adelante el kirchnerismo, la tendencia a la baja en este punto se tradujo rápidamente a la pobreza.
El segundo semestre de 2024, ya íntegramente de la administración de Javier Milei, ya tuvo números escandalosamente mejores que los del kirchnerismo, ubicándose por debajo de la pobreza con la que cerró el año 2022 Alberto Fernández. El Indec informó 38,1% de pobres y 8,2% de indigencia, marcando un retroceso de 14,8 puntos en la pobreza, un número impensado para una política de "ajuste brutal", como el kirchnerismo describió a las políticas de sus sucesores. Para entonces, 17.543.031 de habitantes eran pobres y 3.775.665 indigentes.
Cuál es la pobreza en Argentina
El informe presentado hoy por el Indec muestra una nueva baja que va de la mano con los informes privados del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA y de la Universidad Torcuato di Tella, los cuales indican que la pobreza alcanza al 31,5% y 31,6% de la población.
Según el organismo oficial la pobreza del país está en 31,6%, lo que representa a 9,5 millones habitantes, mientras que la indigencia es del 6,9 (2,1 millones habitantes). El dato es uno de los que se jacta el Gobierno de la Nación cuando habla de haber sacado a 12 millones de argentinos de la pobreza, aunque, en números, está alrededor de los 10 millones de habitantes.
A pesar de que el número es bueno para el Gobierno en términos políticos, la comparación con Alberto Fernández es abismal, no deja de ser en realidad un número dramático para la realidad. Son millones de argentinos que no alcanzan a cubrir necesidades básicas y que se exponen, por su vulnerabilidad socio-económica, a horrores impensados, por lo que la rápida solución debe ser un política prioritaria para el "segundo tiempo" de su administración.
Los desafíos de Javier Milei con la pobreza: medición y resultados
En cuanto a lo que refiere a la medición, desde la oposición pareciera que recordaron el 11 de diciembre de 2023 que el método está desactualizado. El Indec mide la pobreza a partir de la canasta básica, la cual se forma a partir de un estudio de patrones de consumo que está viciado por el tiempo que pasó desde su constitución, por lo que el Gobierno de Javier Milei debe diagramar un nuevo estilo de informe que sirva para darle validez al índice, ser más preciso, generar políticas para plantear soluciones a corto y largo plazo, aunque el nuevo tipo de informe le de números que no sirvan electoralmente, la gestión debe ser el norte en temas que, si no se solucionan, seguirán dañando el futuro del país.
Al mismo tiempo, cabe señalar que un pico de baja en la pobreza no alcanza si no se sostiene. Es por este motivo que, más allá del cambio en el sistema, el Gobierno de la Nación está obligado a buscar soluciones que mantengan este índice a la baja. La pobreza genera más crímenes, más violencia, menos educación, aumento de las problemáticas de salud, generaciones más débiles y condiciona el futuro del país, por lo que sacando del medio los números que sirvan para una campaña o la necesidad de un nuevo método de medición, deben atacarse los problemas fundacionales de la pobreza argentina que acompañan a la inflación.