Navidad en orfanatos: "Lo que se valora no es el regalo, sino el sentirse vistos"
De cara a la Navidad, crece la necesidad de contención en los hogares donde miles de niños conviven a la espera de una familia.
Miles de niños en Argentina esperan ser adoptados y pasar las fiestas en familia.
ShutterstockLlega la época de las fiestas y la mayoría de las familias se aboca a la organización de las cenas de Nochebuena y Fin de año, eligiendo con quiénes pasar cada celebración, planeando qué comidas típicas prepararán para cada fecha, buscando de los regalos perfectos para cada integrante, como, también, algunos tienen la posibilidad de viajar para disfrutar de los días festivos de otra manera. Sin embargo, mientras que gran parte de la sociedad está sumida en un clima totalmente alocado, antes de bajar un cambio y compartir junto a su familia la llegada de cada celebración, hay quienes viven una realidad totalmente diferente durante estas fechas.
En Argentina, más de 10.000 niños, niñas y adolescentes están viviendo en hogares convivenciales, entre los cuales 2.200 se encuentran en estado de adoptabilidad, es decir, esperando una familia que los adopte como hijos. Para esos miles de chicos, las fiestas son distintas.
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“En estas fechas, los hogares convivenciales atraviesan desafíos particulares. El clima emocional suele ser intenso y variable: hay expectativa, pero también tristeza, enojo o angustia”, expresó Natalia Florido, la directora de la Red Argentina por la Adopción, en diálogo con MDZ.
Si bien miles de los menores que residen en hogares sueñan con tener una familia los 365 días del año, lo cierto es que la Navidad y la celebración de Año Nuevo pueden activar otras emociones y anhelos, así como los sentimientos de pertenencia y de pérdida. Precisamente, las tradiciones familiares que predominan en estas fechas, como los reencuentros, los planes y las comidas compartidas -que actualmente se presumen de forma desbordante en las redes sociales- dan lugar a la comparación y al ideal de la existencia de la “familia perfecta”.
En ese contexto, los profesionales que trabajan en los cientos de orfanatos distribuidos a lo largo del país “redoblan la contención”, según contó Florido. “El día 24 suele ser especialmente sensible, por lo que los equipos redoblan la contención, organizan espacios de encuentro y cenas, y acompañan de cerca a los chicos, que muchas veces se sostienen entre ellos”, aseguró la directora de Red Argentina por la Adopción, y agregó: “El día 25 suele ser más calmo, un tiempo de juego, de compartir y de procesar lo vivido”.
El regalo más importante: el sentirse valorados
De cara a las fiestas, la Red Argentina por la Adopción impulsa una jornada solidaria federal con el objetivo de acompañar a niños, niñas y adolescentes que viven sin cuidados parentales. En plena época navideña, el trabajo se intensifica para sostener emocionalmente a quienes atraviesan esta etapa del año con ausencias marcadas.
Desde el 1.º de noviembre y durante todo el año, la Red Argentina por la Adopción lleva adelante una jornada solidaria federal que incluye la entrega de juguetes, bicicletas y otros elementos a hogares convivenciales y familias de acogimiento. Se trata de una acción en conjunto a organizaciones como Racing Solidario, Voy en Bici, Potenciar Solidario y UPA.
“El acompañamiento a las infancias sin cuidados parentales no puede limitarse a una fecha. Las fiestas son una fecha sensible, donde se intensifican las emociones, los recuerdos y las ausencias, y por eso se refuerza la presencia y el cuidado, sin perder de vista que las necesidades exceden lo simbólico y lo estacional”, remarcó Natalia, y dijo con orgullo: “Gracias a este trabajo en red, ya se pudo llegar a Misiones, Chaco, Bahía Blanca, entre otras localidades, y se continúa articulando con distintos puntos del país”.
Más allá del trabajo incansable para hacerles llegar un regalo a los menores que residen en hogares, Natalia cuenta que algunos valoran aun más el hecho de ser vistos y escuchados. “La recepción de los regalos suele ser profundamente emotiva. A veces aparece la alegría espontánea, otras veces el silencio, la timidez o incluso el llanto. Pero lo más valioso no es el regalo en sí, sino el sentirse tenidos en cuenta. Para muchos chicos, saber que alguien pensó en ellos, los nombró y los incluyó, tiene un impacto enorme en su autoestima y en su manera de habitar estas fechas”, subrayó Florido a este medio.
La otra cara de diciembre en los orfanatos: los egresos de los menores
En paralelo al trabajo para contener a los menores durante las fiestas, además, en esta época del año, “la Red Argentina por la Adopción se encuentra acompañando un número significativo de egresos: adolescentes y jóvenes que se están convirtiendo en hijos y que hoy transitan esta nueva etapa junto a sus familias”, según declaró Florido.
Durante todo el año, se brinda apoyo en los procesos de vinculación y en la construcción de estos nuevos vínculos. “Convertirse en familia no sucede de un día para el otro. Requiere tiempo, contención y un acompañamiento continuo”, destacó la profesional. Por eso, también se trabaja con las familias que inician este camino, para que cada egreso sea verdaderamente un nuevo comienzo.
Todos pueden colaborar
Desde la Red hacen un llamado a la comunidad para seguir colaborando durante todo el año. No se trata solo de donar objetos, sino de participar activamente en la construcción de un entramado de cuidado que abrace a las infancias más vulnerables.
Aquellos que deseen colaborar lo pueden hacer transfiriendo el monto que consideren al siguiente alias: NavidadQueAlumbra, a nombre de la Asociación Civil Red Argentina por la Adopción.




