Confesión

El femicida de Catamarca a un amigo: "La cagué, maté a Brenda"

Naim Vera (19) fue a la casa de su mejor amigo y le confesó lo que había hecho el domingo a la madrugada. Su amigo no le creyó y lo mandó a dormir. Unas horas después se entregó en la comisaría tras hablar con un abogado y mintió sobre lo ocurrido.

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MDZ Policiales martes, 3 de marzo de 2020 · 09:21 hs
El femicida de Catamarca a un amigo: "La cagué, maté a Brenda"

El domingo a la madrugada, Naim Vera (19), hijo de un reconocido médico, deambuló durante varias horas en la camioneta de su padre por las calles de la capital de Catamarca y finalmente se dirigió a la casa de su mejor amigo y le confesó: "La cagué, maté a Brenda". Se refería a Brenda Micaela Gordillo (25), su novia, a quien había matado tres horas antes de esa conversación. El amigo del joven no le creyó o no entendió sus palabras y le pidió que se fuera a dormir.

Según consigna Infobae, fue entonces cuando Vera llamó a su padre y a un abogado amigo para confesarles lo ocurrido. De acuerdo a la autopsia que le practicaron al cuerpo de Brenda, el joven la asfixió insertando un pañuelo en su boca y luego quemó sus restos en una parrilla para luego esparcirlos en varios lugares.

Según la reconstrucción, que en estos momentos realiza el fiscal Hugo Costilla, Brenda y Vera comenzaron una relación amorosa ocasional en el mes de diciembre. “No eran novios pero se veían cada tanto, salían a tomar algo, tenían relaciones como cualquier chico o chica de esa edad. Se estaban conociendo”, contó una amiga de la víctima.

El sábado a la tarde, Vera se comunicó con Brenda y la invitó al departamento que era propiedad de su abuela, ubicado en la calle Ayacucho al 68. El inmueble estaba deshabitado, pero el chico tenía las llaves. Ella llegó en su Volkswagen Gol cerca de la medianoche. Cerca de las 3 del domingo, algo pasó. Al parecer discutieron por un supuesto embarazo de la joven y el estudiante de medicina atacó a Brenda. No la golpeó, pero le introdujo un trapo en la boca y la asfixió.

El joven no desmembró el cuerpo como trascendió en un primer momento. Lo que hizo fue colocarlo entero sobre la parrilla. Una vecina se despertó al ver el humo y la llamarada y se sorprendió al ver al joven frente a la parrilla. Eran las 4 de la mañana.

El cuerpo de Brenda se partió en dos producto del calor intenso de las llamas. Al ver que el fuego tardaba más de los esperado en consumir el cadáver, el joven apagó la parrilla y se llevó las dos partes calcinadas para descartarlas en distintos lugares. La parte inferior del cuerpo la tiró en un contenedor ubicado frente al edificio, mientras que la superior la arrojó en la parte trasera de la camioneta Fiat Toro de su padre.

El femicida condujo aproximadamente 20 kilómetros hasta una zona llamada La Quebrada en las afueras de la ciudad de San Fernando Del Valle de Catamarca. Ahí se detuvo, se adentró al campo con los restos del cuerpo de Brenda y los enterró. Luego se quedó unos minutos en el interior del vehículo y aparecieron dos policías que trabajan en un control vehicular cercano. Le preguntaron qué estaba haciendo y el joven les dijo que estaba yendo a trabajar y frenó para mandar mensajes. Le pidieron la licencia de conducir y lo dejaron ir.

“Naim me había contado que la chica le había dicho que estaba embarazada. Incluso ella le había mandado una foto de un test de embarazo y hasta unos estudios a su nombre. Naim se había puesto muy nervioso. Hace algunos días me dijo: ‘Me mato yo o la mato a ella’. Yo le dije que estaba loco, que no se mande ninguna cagada. Incluso me pidió plata pero no le di. Jamás pensé que podía pasar algo así”, declaró en la causa el amigo del acusado.

Tras confesarle lo ocurrido a su amigo, Vera se dirigió a su casa familiar y le contó a sus padres lo ocurrido. Llamaron a un abogado y decidieron que se entregue. En la comisaría, el femicida dio su versión de los hechos, pero mintió. Contó que la víctima se había caído por las escaleras y que había descartado el cuerpo por miedo a que lo inculpen. Esta versión quedó totalmente descartada en las autopsia que se le practicó al cuerpo de Brenda. El estudio habla claramente de una asfixia y de ausencia de golpes. En lo único en lo que no mintió Vera fue en los lugares donde había descartado los restos de la víctima. 

La autopsia reveló que Brenda no estaba embarazada, incluso no podía estarlo. La víctima tenía un quiste en el útero que le impedía tener hijos de acuerdo a los resultados de la autopsia. El mismo examen al cuerpo de Micaela señala que, si bien no tiene golpes ni traumatismos, sí existen lesiones defensivas como arañazos o raspones. “Nos queda claro que cuando la víctima recibe el ataque, es decir la intención de asfixiarla, se trató de defender como pudo”, indicaron los investigadores.

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