Travesía hacia la sustentabilidad: reflexiones sobre la transición energética mundial y los desafíos regionales
En la travesía de décadas dedicadas al estudio de diversos conceptos, hemos llegado a la conclusión de que la transición energética es un intrincado entramado que demanda una serie de fases cruciales.
Desde el mapeo inicial hasta la observación detallada de su evolución y, finalmente, la divulgación de su funcionalidad e impacto, este camino implica variaciones acumulativas que reverberan en la diversidad económica, tecnológica y cultural de cada región.
Al adentrarnos en la reflexión sobre la vida de los pueblos alrededor del globo, enfocándonos en procesos sustentables, surge la imperante necesidad de considerar la situación económica y cultural al introducirnos en el nuevo orden.
La transición energética más sustentable no solo debe abordar limitaciones sectoriales, sino también fomentar la eficiencia y competitividad para alimentar y satisfacer las diversas sociedades. Este enfoque implica la búsqueda de un equilibrio delicado, minimizando la intervención estatal en los intereses privados y promoviendo un modelo que resuene con la eficiencia tanto económica como ambiental. La consecución de eficiencia natural permitirá la evolución hacia un estado menos participativo pero más centrado en la eficiencia. Este cambio implica una relación más equitativa entre el Estado y los sectores privados, donde la adaptabilidad del último deberá ser superadora a la impuesta por gobiernos que, en ocasiones, se ven inmersos en estructuras cartelizadas, especialmente palpables en pueblos latinoamericanos.

La transparencia en cada fase de los proyectos se erige como piedra angular en este proceso
Desde la definición de objetivos hasta el impacto cultural, cada detalle debe ser accesible y claro. Digitalizar estos procesos no es una opción, sino un imperativo, ya que solo a través de la digitalización se puede lograr la implementación eficaz de la
sustentabilidad en la transición energética. La conexión intrínseca entre la prosperidad humana y la naturaleza regional demanda
una retroalimentación constante y el cumplimiento riguroso de cada fase en la cadena de valores. Sin embargo, observamos una amenaza en la manipulación de fases cargadas de prosperidad para beneficiar a unos pocos, lo cual puede socavar la libertad y la
prosperidad del pueblo en general. En este escenario, es crucial comprender el mapeo regional para fiscalizar las dificultades y permitir la inclusión de innovaciones. Evitar la repetición de modelos antiguos, que históricamente han desencadenado conflictos
bélicos y revoluciones internas, se presenta como una tarea ineludible.
La incompetencia, incompatibilidad e insostenibilidad estatal pueden desequilibrar la delicada balanza de la transición energética, especialmente en regiones como América Latina, donde gobiernos cartelizados pueden influir significativamente en la dirección
del cambio. Es esencial buscar una integración más armoniosa y equitativa entre el Estado y los actores privados para evitar desequilibrios que puedan llevar al colapso de los esfuerzos hacia una transición energética sostenible. Para fortalecer la transición energética en los pueblos más pobres, se requieren acciones fundamentales.

La educación emerge como pilar esencial
Proporcionando la base necesaria para la comprensión y participación activa en este proceso de cambio. La inversión, como segundo punto clave, debe ser robusta y estratégica, dirigida hacia tecnologías y prácticas que impulsen la sostenibilidad. La seguridad, como tercer elemento, es fundamental para garantizar la estabilidad y el progreso continuo. Por último, la sustentabilidad del modelo debe ser prioridad, permitiendo la escalabilidad y adaptación a las necesidades cambiantes de la sociedad y el entorno.
Con estas medidas, podemos iniciar una transición energética concreta y directa
Sin embargo, cada paso dado sin un mapeo previo amenaza con socavar el proceso productivo necesario para el desarrollo sostenible de la transición energética. La reflexión sobre cada aspecto, desde la definición de objetivos hasta la implementación y la adaptación a largo plazo, es esencial para garantizar no solo el éxito a corto plazo, sino la sostenibilidad a largo plazo de esta transformación vital.

* Lic. Pablo Rutigliano. Presidente & Fundador Cámara Latinoamericana del Litio.

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