Typosquatting: la peligrosa estafa en la que podrías caer por un simple error

Las nuevas tecnologías y el auge de internet han revolucionado nuestra forma de comunicarnos y hacer negocios, pero también han dado lugar a nuevas formas de estafas y fraudes. El phishing es una de las técnicas más conocidas en este campo, que consiste en engañar a los usuarios para que revelen información confidencial a través de correos electrónicos, mensajes de texto o sitios web falsos que parecen legítimos.

Sin embargo, existe otra técnica de delito informático menos conocida pero igual de peligrosa: el typosquatting. Esta técnica implica crear nombres de dominio de sitios web que son similares a los nombres de dominio de sitios web populares y legítimos.

Esta estafa busca aprovecharse de los errores tipográficos al escribir la dirección del sitio web legítimo y dirigir a los usuarios a un sitio web falso que puede estar diseñado para parecerse al sitio web original. De esta manera, los atacantes pueden obtener información confidencial de los usuarios sin que estos lo sepan. Como por ejemplo mdzo.com en lugar de mdzol.com (tenga en cuenta la "l" que falta). Otro ejemplo de esta estafa puede ser Googgle.com. 

Existen también diferencias menos sutiles, por ejemplo, añadir una palabra o un signo de puntuación al nombre de dominio legítimo.

Cómo evitar ingresar a este tipo de páginas

Existen varios consejos para evitar caer en la estafa del typosquatting. 

• Siempre que sea posible, ver los sitios importantes, como los servicios bancarios, las redes sociales o las compras desde tus propios favoritos guardados, en lugar de escribirlos en la barra de direcciones del navegador cada vez.
• Al escribir una dirección en la barra de direcciones, escribirlo cuidadosamente y comprobar que lo que escribió coincide con la dirección a la que quería ir antes de continuar.
• Si se escribe una dirección a la que el usuario ya ha visitado, es posible que el explorador ofrezca completar la dirección por sí mismo. Siempre es recomendable mirar, aunque siempre es más seguro aceptar la sugerencia.
• No cliquear vínculos que no se esperaban en un correo electrónico u otro tipo de mensajes.
• Tener un buen antivirus y un firewall, que puedan ayudarte a detectar y evitar sitios web falsos y otros ataques cibernéticos.

En caso de caer en una de estas páginas, se recomienda cerrar la pestaña y volver a empezar. Algunos exploradores tienen la opción de reportar los sitios no seguros.