El gran Sorolla retratista

La exposición viene a ratificar también la maestría de valenciano en una temática que desarrolló ampliamente, que le dio prestigio y dinero. Esto, sin desconocer que fue con sus playas soleadas, las barcas con las velas infladas y los niños jugando donde se acuña el “Luminismo” y Sorolla se inscribe en el arte universal.

Este centenario coincide con los cincuenta años de la partida de Picasso, con lo que bien puede decirse que la pintura española está de fiesta.

Volviendo a nuestro artista de hoy en su faceta de retratista, vale recordar que en su juventud trabajó en un estudio fotográfico dedicado a ese menester y que en su viaje formativo a Italia conoció a Boldini, quien junto con Sargent, sobresalía en ese género, entre la aristocracia de principios del siglo XX.

La nota distintiva que puso Sorolla, que lo diferencia del italiano, el estadounidense y otros grandes retratistas de la época (Zorn, Laszlo) es su manejo de los grises y negros. Asimilado de Velázquez a quien Sorolla estudió con devoción ese fue su rasgo característico.

La exposición de Madrid presenta 18 obras de Sorolla que se completan con retratos de otros artistas, la gran mayoría del acerbo del museo.

Viene a cuento recordar que Sorolla disfrutaba ya en época temprana de un prestigio universal que consolida con su exposición en Londres en 1908. Alli Archer Huntington, el creador de la Hispanic Society de New York, se apasiona del artista y con el tiempo convierte a su museo de la gran manzana, en el espacio sorollesco más importante fuera de España.

A partir de 1911, Sorolla pinta durante ocho años en la Hispanic Society “Visiones de España”, un óleo de 3,5 x 60 metros, con los personajes y costumbres de las distintas regiones ibéricas.

Se estima que en Buenos Aires hubieron màs de medio centenar de óleos de Don Joaquín. Desde tablas de pequeño formato que su marchante exponía regularmente en la ciudad hasta grandes retratos de encargo. Eran las décadas de la Argentina próspera…

Nuestro Museo Nacional de Bellas Artes tiene once obras del artista. Dos de ellas, “La vuelta de la pesca” y “En la costa de Valencia”, de primer orden. También el retrato de José Prudencio Guerrico, donación de su viuda, que nada tiene que envidiar a los mejores de la exposición de Madrid. Interesante sería que, en adhesión al Centenario, el Museo presentara todas juntas las obras de su acerbo (hoy la mayoría están en depósito)

Sorolla pintó a don Carlos Pellegrini en dos versiones (una en el Banco Nacion y la segunda en el Jockey Club).

Don Diego de Alvear coleccion particular

También por duplicado a don Diego de Alvear, a Ramon y Mercedes Santamarina y a varios argentinos más.

Don Enrique Larreta, que tanto hizo por la difusión dela cultura hispánica entre nosotros le profesaba profunda admiración. Quirós, que lo frecuentó en España, lo emuló en muchas de sus obras.

En definitiva, considerándolo un poco propio, también nosotros celebramos el centenario del gran Sorolla.

* Carlos María Pinasco es consultor de arte.

carlosmpinasco@gmail.com