Por qué hoy se celebra el Día Mundial de la Tolerancia y cómo se puede promover el respeto
La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) impulsó esta efeméride en 1993 para potenciar la aceptación, el respeto y el entendimiento.
El Día de la Tolerancia se celebra cada 16 de noviembre, lo cual refiere a la capacidad que tiene alguien de respetar las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias. El concepto es claro, pero llevarlo a la práctica puede ser más difícil. ¿Por qué se estableció esta fecha y cómo se puede ser más tolerante?
En época de elecciones, como se está viviendo en Argentina, las opiniones políticas, sociales y económicas de los ciudadanos suelen tomar mayor protagonismo en las redes sociales y los encuentros. La disputa de cara al balotaje se materializa entre quienes quieren votar a Sergio Massa, a Javier Milei, u optan por el voto en blanco o impugnado; también entre quienes eligen a un candidato convencidos y aquellos que van por "el menor peor".
Cómo surgió el Día de la Tolerancia
La iniciativa fue impulsada por la Organización de las Naciones Unidas para la Cultura, las Ciencias y la Educación (Unesco) en 1993. Había una intención por homenajear el aniversario de Mahatma Gandhi, reconocido líder del movimiento de independencia de la India contra el Raj británico y uno de los más importantes pacifistas de la historia.
Ese mismo año, y bajo promoción de la UNESCO también, la ONU estableció que en 1995 se ponga en vigencia el Año de las Naciones Unidas para la Tolerancia. Así, y a través de la resolución 51/95, invitó a los Estados Miembros a celebrar el Día Internacional de la Tolerancia cada 16 de noviembre.
Cómo promover la tolerancia
Con ello, las Naciones Unidas se comprometieron a fortalecer la tolerancia. ¿Cómo? Fomentando la comprensión mutua entre las culturas y los pueblos. Algunas formas para promover este respeto y comprensión pueden ser:
- Lo principal es respeta las ideas, creencias y pensamientos que tengan los demás, independientemente de si coinciden con los de uno.
- Escuchar al otro e intentar comprender la posición de los demás.
- Ponerse en el lugar del otro.
- Aprender a compartir.
- Comunicar un punto de vista, en lo posible argumentado, sin intentar herir a los demás.
- No burlarse de las diferencias de los otros.
- Conocer y respetar las capacidades e incuso los tiempos de los demás.
- Aprender a ganar y tener razón, así como a perder y equivocarse.