Las enseñanzas que deja el modelo Coldplay

Tuve el privilegio de estar en uno de los shows que hizo Coldplay hace unos días y quedé impactada por la experiencia sensorial, única e inclusiva que viví. La puesta en escena – que permite a los que están ahí ser parte-hace que este recital tenga un propósito, un mensaje poderoso y un valor agregado diferencial, pensado para trascender más allá del lindo espectáculo musical que brinda.

Las protagónicas pulseras luminosas hacen sentir a la gente que tiene un rol en el espectáculo, mientras que los distintos escenarios que se montan en todas partes del estadio permiten que el público acceda a un contacto cercano con la banda: desde los que están en campo delantero o platea preferencial hasta quienes están atrás de todo.

El foco orientado a cuidar el medioambiente, donde la sustentabilidad y la inclusión (con chalecos vibratorios para los que tienen discapacidades auditivas y con lenguaje de señas para que comprendan la letra) se ven reflejadas claramente en este concierto y son gran parte del valor de este espectacular show, además de la empatía que Chris Martin le impone. A partir de lo que viví, me puse a reflexionar por qué puede ser un ejemplo a seguir para las compañías y las marcas.

Del discurso a la acción y la invitación

El discurso y lo que comunica Chris Martin en el Monumental fue impactante, pero considero que más importante todavía es que sus palabras están respaldadas por las acciones que realiza el grupo para cuidar el planeta y a las personas que habitamos en él.

Music of the Spheres World Tour, como se denomina la gira que está realizando la banda, cuenta con tres objetivos: reducir las emisiones en un 50%, reinventarse a través de tecnologías verdes y restaurar mediante proyectos beneficiosos para el medio ambiente.

La instalación de paneles solares, la utilización diésel renovable y la implementación de la primera batería recargable móvil para espectáculos son algunos elementos que demuestran que las ideas que comunica Coldplay se traducen en acciones.

Ahora bien, al analizar la estrategia, puedo descubrir que está incluso un paso más adelante, porque la banda no solo hace, sino que también invita a la comunidad a participar de su propuesta sustentable: las pistas de baile cinéticas y las bicicletas estacionarias permiten que el público sea capaz de producir energía eléctrica saltando o pedaleando.

Por qué las acciones sustentables concretas son fundamentales para el negocio

La sustentabilidad es un tema clave en la agenda de los líderes empresariales. En Latinoamérica, el 69% cuenta con una estrategia sobre este tema, según un estudio de SAP.

Sin embargo, a diferencia del modelo Coldplay, muchas veces las planificaciones pueden no llevarse a la práctica o derivar en hechos aislados e intrascendentes. Esto puede producirse por motivos como desinterés de quienes comandan la organización, escasez de presupuesto o falta de información acerca de sus beneficios.

Sobre este último punto me gustaría hacer hincapié: resulta fundamental que las organizaciones actúen con conciencia ambiental y social. Por un lado, porque les permite aprovechar mejor sus recursos y contar con mayores beneficios a largo plazo.

El otro aspecto que se debe considerar consiste en que la sustentabilidad es un elemento que impacta directamente en la reputación de marca. Las personas están más dispuestas a elegir a aquellas compañías que se preocupan por ellas y por el país en el que viven. Tal como Coldplay tiene cada vez más fans que sienten que son parte de algo mucho más grande que un show.

Sustentabilidad: el valor agregado del negocio

El modelo Coldplay demuestra que cualquier compañía puede cumplir con su misión y al mismo tiempo ofrecer una propuesta sustentable. Incluso, este enfoque es capaz de mejorar el negocio: no tengo dudas de que, además del talento musical que ofrece la banda, las iniciativas ecológicas le dan al show un plus que lo vuelve único.

Para que una marca sea “única”, necesitamos que las palabras sean respaldadas con hechos concretos que vayan de la mano con el resto de los objetivos que posee una compañía.

Por eso, considero que Coldplay nos deja esa enseñanza: la sustentabilidad y la inclusión hay que potenciarlas a través de propuestas innovadoras. Y si logramos que el público participe de ellas, la meta está aún más que cumplida.

*Por Silvina Seiguer

*Directora de Comunicaciones y Responsabilidad Social de Kimberly-Clark Latinoamérica y miembro del Círculo de Directores de Comunicación (DirComs)