¿Dónde quedó la gratitud?

No hace mucho tiempo todos los que nos capacitamos en neurociencia tratamos de ser agentes multiplicadores de la importancia de la gratitud, claro, cuando es genuina y diaria. Ser agradecidos, poder diariamente pensar en todos las cosas simples que al naturalizarlas no valoramos y mucho menos agradecemos. en las escuelas desde chiquitos uno puede trabajar ese hábito y hacerlo profundo sentido real, hacer ese simple ejercicio nos sube la serotonina aumenta el bienestar y mejora nuestro sistema inmune.

Sin embargo, los adultos estamos lejos de esta práctica pese a que la ciencia comprueba y garantiza sus beneficios, nuestros cerebros por estructura ven con más claridad lo malo y la queja continua y constante es un clásico en todos los ámbitos a, trabajo , familia cena con amigas.

Unos se quejan otros permitimos que la queja se instale, préstamos la oreja, aseveramos, que en este país nada es posible, que los precios, que la gente, fin de año, la falta de valores, la juventud perdida, educación nefasta, salud si rumbo y así un sin números de, comentarios qué no termina nunca, tal vez sea tiempo de desentonar!

De sonreír y preguntar que tenes para agradecer hoy, hacer pequeños momentos donde cada uno en su casa pueda agradecer algo de su jornada, siempre hay algo nuevo, podemos llevar un diario de gratitud individual o grupal, no importa que ni cuándo, lo importante es agradecer, y cada día de tu vida.

Hoy elijo agradecer poder expresar mis pensamientos en MDZ online. Tener la dicha de poder escribir leer y hacer lo que me gusta, súmate al desafío, invita a tus grupos de whatsapp a que escriban que cosas pueden agradecer.

Al principio cuesta, pero luego vale la pena, se eso no tenemos dudas.

* Lic. Erica Miretti Psicóloga. Neuropsicoeducadora. Docente