El Consejo Deontológico, dependiente del Ministerio de Salud, encontró culpable de todos los hechos que se le imputan al anestesista Jorge Omar Maddio y lo suspendió por cinco años en el ejercicio de la medicina. El anestesiólogo se encuentra detenido e imputado en 41 hechos bajo la calificación de "producción de pornografía infantil en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante" y la causa está próxima a ser elevada a juicio.

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El instructor sumariante decidió otorgar la máxima pena al anestesista por encontrarlo responsable de filmar, almacenar y realizar tocamientos inapropiados a menores de edad. "La defensa del profesional no logró desvirtuar las imputaciones efectuadas y por tal motivo los hechos se consideran probados con grado de certeza", indican desde el Consejo Deontológico.

Por esta situación, al igual que con las profesionales intervinientes en el caso de Guadalupe Codes, se le aplicó la máxima pena que puede otorgar la cartera sanitaria. Es decir, cinco años de suspensión para ejercer la profesión médica en cualquier ámbito.

Desde el Consejo Deontológico destacaron que el instructor a cargo del sumario es un médico anestesista al igual que Maddio, a quien se le otorgaron todas las pruebas del caso para que evaluara el proceder del médico según el Código de Ética de la Confederación Médica de la República Argentina y la Ley de Derechos del Paciente.

El caso

Maddio se desempeñaba como anestesiólogo en la Clínica Francesa y en el Hospital Notti, donde trabajó durante 20 años. En marzo del año pasado fue denunciado por un compañero de la clínica privada que lo encontró en una situación extraña con un paciente. Tras realizar un allanamiento en su casa del barrio Trapiche de Godoy Cruz, los investigadores secuestraron su teléfono celular, computadoras y otros dispositivos de almacenamiento. En la posterior revisación, se hallaron más de 7.000 videos de pedofilia.

De acuerdo a los relatos de los padres de las víctimas, Maddio los hacía salir de su consultorio para quedarse a solas con los niños y los manoseaba en los genitales asegurando que era parte de la revisación. El acusado habría filmado muchas de estas situaciones, que también se producían en el quirófano cuando los niños se encontraban dormidos aguardando para ser intervenidos.

Inicialmente, la investigación comenzó con una decena de denuncias y se fueron sumando casos hasta llegar a los 41 por los cuales está imputado. Cuando fue denunciado, Maddio se encontraba con licencia psiquiátrica. Tras ser detenido, tuvo un brote psicótico y pasó unos días en el hospital neuropsiquiátrico El Sauce, pero luego retornó al penal donde permanece alojado.