La niña que abortó por una violación tenía "un riesgo de salud alto"
La niña de once años que fue sometida en San Juan a una interrupción de su embarazo producto de una violación de su padrastro, presentaba un "riesgo de salud alto" antes de la intervención, y además "había pedido que le sacaran" el feto en gestación, explicó la fiscal del caso Claudia Salica.
La niña de once años que fue sometida en San Juan a una interrupción de su embarazo producto de una violación de su padrastro, presentaba un "riesgo de salud alto" antes de la intervención, y además "había pedido que le sacaran" el feto en gestación, explicó la fiscal del caso Claudia Salica.
La pequeña presentaba "un riesgo de salud alto, evaluado por las asesoras de menores en conjunto con los médicos intervinientes. Por ello, más allá de los pensamientos particulares, lo que queríamos era salvaguardar a la nena y si se podía a la persona por nacer, pero este extremo no ha podido ser llevar a cabo", indicó la funcionaria en MDZ Radio.
En ese sentido, Salica señaló que "la nena tampoco tuvo conciencia de todo lo que estaba pasando, porque viene de una familia muy humilde que vive en condiciones precarias, tomando conocimiento a través de los profesionales de la salud". Por ello, añadió la fiscal, la víctima "había pedido que le sacaran ‘eso que tenía’, según sus propias palabras".
Respecto a los mecanismo que permitieron concretar el aborto, Salica manifestó que "sin perjuicio de que no exista una adhesión por parte del Ministerio de Salud provincial al protocolo marcado por la Corte Suprema de Justicia tras el caso F.A.L., se ha actuado con la mayor premura para tomar decisiones temprana y oportunas, y no lamentar alguna otra consecuencia".
Consultada sobre si se están repitiendo estos casos en San Juan, la fiscal indicó que las cifras "son realmente alarmantes", y subrayó que "desde hace dos años, que se creó el centro ANIVI de abordaje integral para niños víctimas, podemos decir que se registraron 1.230 víctimas de abuso, número por demás abrumador".