Modus operandi

Un médico se defendió a los tiros de un asalto

Ernesto José Crescenti, de 65 años de edad, regresaba de sus vacaciones cuando fue sorprendido por cuatro delincuentes en la puerta de su casa en el barrio porteño de Parque Chacabuco. El médico no dudó en sacar su sarma y se produjo un tiroteo en el lugar. Uno de los asaltantes habría muerto unas horas después, tras ser alcanzado por uno de los disparos en la cabeza.

lunes, 11 de marzo de 2019 · 11:15 hs

El médico Ernesto José Crescenti, de 65 años, regresaba de sus vacaciones con su familia el viernes por la noche. El dueño del instituto especializado en oncología que lleva su nombre estacionó en la puerta de su casa, en el barrio porteño de Parque Chacabuco, para poder bajar el equipaje. A los pocos minutos fue sorprendido por cuatro ladrones. Sin dudar, el doctor sacó su arma y se defendió a los tiros. Se registraron, al menos, 16 disparos.

De acuerdo a lo informado por TN, la balacera fue en la calle Santander al 500, alrededor de las 21. Crescenti había dejado su camioneta Toyota Rav 4X4 negra en la entrada de su domicilio cuando fue interceptado por los asaltantes, que viajaban en un auto blanco.

El médico, que es legítimo portador de una pistola calibre 357 marca Glock, se defendió del robo a los tiros. A pesar de la intensidad del tiroteo, ni él ni su familia resultaron heridos. Los delincuentes se escaparon.

Esa misma noche, un hombre con una herida de fuego ingresó al Hospital Penna, del barrio porteño de Parque Patricios. El hombre murió unos minutos después por una lesión que tenía en el cráneo.

Indignados por la situación, los vecinos de Crescenti aseguraron que no es la primera vez que viven un episodio de este estilo en la zona y que están cansados de exigir seguridad.

"En este barrio entramos en pánico cuando llegamos a nuestras casas. Acá te roban al voleo", explicó uno de ellos. A su vez, indicaron que el auto blanco que atacó al médico ya había robado hace poco. "Los policías ya lo reconocen. Siempre viajan adolescentes. Pero no los pueden agarrar", se quejaron.