La historia bíblica que entrelaza a Cristina Fernández de Kirchner con Axel Kicillof
Corrido Ricardo Quintela de la discusión, quedó desnuda la pelea que mantiene CFK con el gobernador de Buenos Aires. Las dudas sobre el futuro gabinete, el rol de Massa y De Pedro y el debate futuro.
En el último discurso público que la tuvo como protagonista, Cristina Fernández de Kirchner adoptó un par de frases bíblicas para ilustrar su enojo con Axel Kicillof, a quien calificó como Judas y Poncio Pilatos.
En un extenso diálogo telefónico con MDZ, uno de los intendentes que más los conoce, fue un poquito más allá al señalar que el gobernador bonaerense está sufriendo el Síndrome del Ángel Caído, que pasó de ser el preferido de Dios y cuando se reveló tardó segundos en ser expulsado del Cielo. Fue en ese momento cuando Lucifer se transformó en el Diablo.
Así las cosas, son pocas las posibilidades de que la expresidenta y su antiguo referente y mimado tengan alguna chance de reconciliarse, salvo que Axel Kicillof realice la purga necesaria y vaya hasta el noveno infierno, como lo describe el Dante en la Divina Comedia. "Cristina terminó perdonando a todos los que la desafiaron, desde Sergio Massa a Alberto Fernández", exclamó la misma fuente.
¿Qué es lo que piensa Axel Kicillof? Que no quiere padecer lo mismo que sufrió Alberto Fernández. Y lo dice con conocimiento de causa. ¿Se habrá arrepentido de haber acompañado a su exjefa política en cada decisión que tomó y cada acusación que realizó contra el presidente del Frente de Todos? Nadie lo sabe. Él solo atinó a decir que no quiere que le pase lo mismo.
Sergio Massa, otro protagonista en la historia moderna del peronismo kirchnerista unificado, es otro que vivió el doble comando cuando vivía Néstor Kirchner. Se fue de la jefatura de Gabinete tras el fuerte desgaste que sufrió por haberse decidido en favor de la entonces presidenta, que en más de una oportunidad no quería seguir los parámetros dispuestos por su esposo.
La mayoría de la dirigencia, inclusive quien habló con este cronista, considera que la expresidenta arriesgó mucho al querer conducir el PJ nacional. Y que eso la hizo perder algunos respaldos que hasta ayer eran más que cercanos a ella. "Pero todo se acomoda. Cristina conduce, los va a meter a todos adentro de nuevo y los que no quieren venir no lo hacen porque sus intereses son otros, no tienen que ver con nuestro partido".
Ricardo Quintela, claramente, para el Instituto Patria empieza a ser un aliado de Javier Milei. Por sus problemas financieros necesita del auxilio del Gobierno nacional, al igual que Raúl Jalil, de Catamarca, y Osvaldo Jaldo, de Tucumán. Esa ayuda, por supuesto, nunca llega, ni siquiera para los aliados históricos.
Otro intendente, que en ningún momento pensó en acompañar a Cristina en su primer intento por presidir el PJ, y mucho menos acompañó el operativo clamor, a pesar de los llamados que recibió, asume, también, que Axel Kicillof no está en un lugar de comodidad. "Tiene que ejercer el poder", sostiene y recuerda las charlas que tenía con Néstor Kirchner, Eduardo Duhalde y el propio Sergio Massa, especialistas en la conducción y la construcción política.
"El mes que viene será un momento de decisiones para Axel", dice. Utiliza el nombre de pila por el cariño que le tiene, pero a la vez acepta que es muy difícil que el gobernador abra su corazón. "Le cuesta generar confianza", dice casi con desazón. ¿Vendrá un cambio de Gabinete? ¿Incorporará a los que aún están deseosos de acompañarlo pero no lo ven con decisión?
Quien puede tener una respuesta a esos y otros interrogantes es, nuevamente, Sergio Massa, el presidente del Frente Renovador, quien el año que viene conducirá la Cámara de Diputados a través de uno de sus referentes de confianza. Pero, como todo, no podrá hacer público su decisión hasta que voten el cambio de autoridades porque el 66% lo dominan Martín Insaurralde con Máximo Kirchner.
El excandidato presidencial tiene la pesa exacta para desbalancear el juego. Si se alía con Kicillof, la cancha se inclinaría hacia ese lugar. Ya dejó de pensar como lo hacía en 2013, año en el que desechaba cualquier posibilidad de ser gobernador. Quiere ser presidente, pero con un aliado con el cual dividir el poder, siente que nada es imposible.
Massa y "Wado" De Pedro, son los que tienen futuro según un intendente independiente, quien, sin embargo, no tiene un buen concepto del exministro del Interior. Para Jorge Ferraresi, De Pedro tiene otra calificación un poco más cruel. Pero que, a la hora de la política, siempre le da una sobrevida.
Quintela nunca fue rival para la expresidenta. Las presentaciones y los avales dejaban agujeros inexplicables para un aspirante para el cargo de presidente del PJ. "Lo podríamos haber dejado correr, pero nunca nos dio la seguridad de que quisiera competir en verdad sino que pretendía armar un circo de la elección", dijo uno de los que terminó decidiendo en favor de la impugnación en el seno partidario.
"Para lo que viene necesitamos un presidente como Cristina. Cuando lo fue el compañero José Luis Gioja, antes que Alberto, nadie iba a sus reuniones", recordó un antiguo miembro partidario. "Ahora se verá quienes son funcionales a un proyecto peronista y quienes no", disparó, amable pero desafiante, el huésped del Patria, que este martes no estará ni cerca de Tigre, cuando Juan Schiaretti y Florencio Randazzo visiten al intendente Julio Zamora, cada vez más lejano a la estructura peronista K.