Procesaron al otro hijo de Walter Bento con un embargo millonario

El juez Eduardo Puigdéngolas dispuso el procesamiento sin prisión preventiva de Luciano Ezequiel Bento, hijo del juez federal Walter Bento. Lo acusa de ser co-autor del delito de lavado de activos de origen ilícito y le trabó un embargo por 75 millones de pesos. En los autos de procesamiento enumera distintas operaciones que habrían tenido como objetivo legitimar ingresos que estaban vinculados a acciones delictivas cometidas por su padre. Su hermano, Nahuel Bento y su madre Marta Boiza también se encuentran procesados.

Entre otras cosas, apuntan que no pueden justificar el dinero para compra de inmuebles, vehículos de alta gama y operaciones comerciales que en realidad fueron realizadas para legitimar dinero que habría ingresado al grupo familiar de forma espuria por acciones ilegales que habría llevado adelante Walter Bento.

"El delito de enriquecimiento ilícito atribuido a Walter Ricardo Bento y Marta Isabel Boiza, estuvo fundamentado en el crecimiento patrimonial ostensible de los nombrados, que no se encontraría justificado por los ingresos lícitos del grupo familiar investigado. Además, como consecuencia de ese aumento patrimonial ilegítimo, también se imputó la presunta comisión del   delito   de   lavado de activos, por cuanto surgió de la investigación, la existencia de operaciones de conversión, transferencia, administración, venta, disimulación y puesta en circulación en el mercado, de bienes provenientes de un ilícito penal, cual es el enriquecimiento   ilícito investigado, con la consecuencia de que los bienes originarios o los subrogantes adquirieran la apariencia de un origen lícito", argumenta el juez Puigdéngolas.

Si bien Nahuel Bento y Marta Boiza fueron procesados hace tiempo, Luciano Ezequiel Bento no había prestado indagatoria por "razones de salud". Finalmente el 15 de febrero presentó un escrito en el que aclara que no conoce el proceso por su estado psíquico limitado y remarca que él se dedica a sus "amigos, a hacer buenos asados con ellos y a los videojuegos", a los que define como su "gran pasión".

Sin embargo, para la justicia existen elementos para procesarlo por "poner en circulación fondos de procedencia ilícita, al adquirir bienes muebles e inmuebles registrables, como así también realizar inversiones  en fideicomisos inmobiliarios y numerosos viajes   al exterior, dando apariencia de legalidad al producido de las maniobras ilícitas mediante su incorporación al sistema económico formal".

Entre otras cosas se investiga el adelanto de herencia mediante el cual se puso a su nombre un departamento, una cochera y una baulera en Palmares. También operaciones de compra y venta de vehículos de alta gama como un BMW 120I o un Audi A3, entre otros.

Por otro lado, se puso bajo la lupa la adquisición de un coqueto departamento en Maipú y varios locales comerciales en el complejo Il Mercato, también ubicado en ese municipio.

"El   incremento desmesurado del patrimonio del grupo familiar investigado, por el ingreso injustificado de fondos y bienes, habría determinado que los mismos realizaran diversas operaciones y maniobras tendientes a disimular su origen espurio, para confundirlos con su patrimonio legítimo", sostienen los investigadores. Además también se observan 70 viajes al exterior a destinos como Miami (Estados Unidos), Nueva York (Estados Unidos), Cancún (México), Emiratos Árabes Unidos y Queen Beatrix (Aruba), entre otros lugares.

Si bien el joven abogado argumentó que "no se puede lavar lo blanco" en relación a la "falta de prueba dirimente por no haberse realizado un juicio de trazabilidad del dinero y el bien", el juez sostiene que podría haber intervenido activa y conscientemente en las maniobras de “blanqueo”, incluyendo en su patrimonio bienes que razonablemente pueden considerarse provenientes de las actividades ilícitas descriptas, para disimular su verdadero origen y darles apariencia legítima.

Por ese motivo resolvió trabarle un embargo por 75 millones de pesos y dictar el procesamiento sin prisión preventiva.

Walter Bento está acusado de liderar una asociación ilícita en concurso real con el delito de cohecho pasivo en calidad de autor, enriquecimiento ilícito, en concurso real con el delito de lavado de activos de origen delictivo, prevaricato, falsedad ideológica y abuso de autoridad en calidad de autor.