Axel Kicillof consiguió un gesto histórico que podría hacer estallar todo lo conocido hasta el momento
Unión por la Patria consiguió cerrar un acuerdo integral pero todo está entre algodones. El oficialismo escondió las miserias que expusieron, desnudos, el PRO, la UCR y los libertarios de Milei.
Axel Kicillof quedó más que tranquilo luego de la tensa jornada que aún no concluyó en la legislatura bonaerense al conseguir que las figuras más discutidas de la Cámara, posiblemente vinculadas con la asociación ilícita de Julio "Chocolate" Rigau y Claudio y Facundo Albini, quedaran relegadas de la primera plana y la puja entre Sergio Massa y la sociedad de Máximo Kirchner con Martín Insaurralde desembocó en una relativamente pacífica foto de familia.
Sin embargo, lo que más impacta en la definición de las autoridades de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires es la desintegración de todos los espacios políticos, inclusive el oficialista, que aún no pudo determinar la distribución interna entre massistas, kirchneristas e intendentes no alineados.
La constelación de bloques constituidos a partir de la jura de los nuevos legisladores pusieron en evidencia el brutal reacomodamiento político en todas las fuerzas y el acelerado quiebre de lo que hasta ayer se consideraba "oposición".
Alejandro Dichiara será el próximo presidente de la Cámara, pero sólo por un año, ya que a finales de 2024 deberá dejar su lugar a Alexis Guerrera, el exministro de Transporte que recién ingresó a la legislatura bonaerense. Por ahora será vicepresidente primero. Por este nombramiento, el que ahora está enajenado y no entra en razones es Carlos "Cuto" Moreno, a quien la mayoría de su bloque no lo soportaba más. Igualmente, logró sobrevivir como vicepresidente segundo. En esto también influyó Kicillof.

Foto: José Luis Carut/MDZ
Dichiara fue intendente de Monte Hermoso, localidad de la Sexta Sección electoral, en la zona sur de la provincia de Buenos Aires. Representa la continuidad de la dupla de Martín Insaurralde con Máximo Kirchner en la administración de "la Casa" pero, además, es un clarísimo corrimiento del conurbano bonaerense que representaba Federico Otermín, hoy intendente de Lomas de Zamora.
La Sexta Sección electoral fue la "estrella" de la elección bonaerense para Unión por la Patria por cuanto pudo recuperar, luego de muchos años, la administración de Bahía Blanca, ahora en manos de Federico Susbielles.
El presidente fue electo luego de una semana de tediosas y frenéticas negociaciones en la que todos tenían mucho por perder y, además, por demostrar. Sergio Massa había reclamado para sí la conducción de la Cámara Baja y el nombre elegido era Rubén Eslaiman, una figura que asociaba consensos con confianza de todos los bloques.
Lamentablemente para él, la aparición pública de Julio "Chocolate" Rigau y sus jefes directos, Claudio y Facundo Albini, le puso bolilla negra a su nominación. La investigación judicial realizada por la fiscal Betina Lacki y el juez Guillermo Atencio hace suponer que los detenidos no trabajaban en soledad y los nombres de Eslaiman y Raúl "El Cabezón" Pérez, hombre fuerte del Frente Renovador en La Plata, estaban en la mira.
Axel Kicillof, quien había dejado trascender que ejercería su poder de veto, no necesitó utilizarlo Inclusive algunos funcionarios cercanos a su gobierno dejaron en claro que fue una ministra de su confianza quien había propuesto, hace un mes, el nombre del "Langa" Dichiara, quien a su vez deberá dejar ese lugar el año próximo para ser reemplazado por el renovador Alexis Guerrera. En política, un año es un siglo, pero elijen creer.
No obstante, con estas designaciones, Unión por la Patria vuelve a demostrar no solo su practicidad, sino su cintura política. Sin embargo, en el PRO, nada cambió, inclusive a pesar de la feroz paliza política sufrida, el delfín de Néstor Grindetti, el diputado provincial Adrián Urelli, seguirá siendo el vicepresidente primero de la Cámara. Es decir, el que firma los cheques y autoriza las contrataciones junto con el presidente, como sucedió con "Chocolate".
¿Cómo es que no cambian nada? ¿Cómo puede ser que no se den cuenta que la gente los quiere matar a todos y siguen haciendo lo mismo? le preguntó MDZ a un importante intendente opositor. "Efectivamente, es una buena pregunta que le deberías hacer a Néstor o a Cristian Ritondo. Hay cosas que cambiaron y hay que registrarlo", remató.
Dentro del PRO, que armó un bloque propio apartado del radicalismo, la presidencia la ejercerá el recientemente electo Agustín Forchieri, de extrema confianza con Diego Santilli. Pero, el año próximo deberá dejarle el comando a Matías Ranzini, oriundo de Zárate y aliado de Cristian Ritondo y María Eugenia Vidal.
En cuanto a los representantes de La Libertad Avanza, la Cámara de Diputados los encontrará divididos en cuatro bloques, uno de nueve, otro de cinco y dos unipersonales. El más importante, integrado por los nuevos, será conducido por una "antigua" Constanza Moragues. Ella se plegó a los que ingresaron este año con los acuerdos realizados con sectores del peronismo y el massismo boanerense.
El otro estará conducido por Nahuel Sotelo. Moragues y Sotelo ingresaron en 2021 en la lista que encabezaba José Luis Espert. El otro que ya lleva dos años en la legislatura, el marplatense Guillermo Castello, armó su bloque propio al igual que la aliada de Carolina Píparo, Jazmín Carrizo.
Tras jurar los diputados, Rubén Eslaiman pidió un cuarto intermedio sin horario de retorno. El legislador juró por "Dios, por la Patria y por mi conductor Sergio Massa". En ese período, los radicales, que en principio designaron al aliado de Maxi Abad, Diego Garciarena como presidente del bloque, terminaron fracturándose. Las heridas de la interna subsistieron hasta hoy y el platense Claudio Fragnul se alió con otros diputados del GEN y la Coalición Cívica para armar otro bloque aparte. También las esquirlas de los "chocolatitos" sueltos animaron esta situación.
Este período para definir las autoridades también será una prueba para modificar el reglamento interno y posibilitar armar un interbloque de Juntos por el Cambio. Los interbloques no están autorizados en la actualidad. Es un pedido de la oposición que tendrá un costo para la desgarbada expresión cambiemista.
El oficialismo pretende otorgarle una vicepresidencia legislativa de las cuatro que existen al bloque mayoritario de los libertarios "amigos", todos peronistas, massistas y menemistas. Como se ve, a pesar que el escándalo de "Chocolate" fue producto de la masividad de autoridades legislativos y la cantidad de contratos que tienen presidente, vicepresidentes, autoridades de bloque y de comisiones, nada cambia.
"No se dan cuenta que están matando a la vaca, pero no se preocupan. Cuando no tengan ni leche, ni carne, ni cuero, porque la gente los va a escrachar en las calles, quizás se den cuenta", le dijo este miércoles bien temprano otro intendente que prefirió mantenerse apartado de semejante reparto, a pesar de tener legisladores que le responden fielmente.
Traducido. Por cada bloque, manejo presupuestario independiente. Por cada cargo, un asesor o dos adicionales. Y así hasta el infinito. Las ideologías han muerto.

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