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Dante Vega sobre Walter Bento: "Hay riesgo de fuga”

Entrevista exclusiva de MDZ al fiscal que lleva adelante la investigación del juez federal Walter Bento.
Dante Vega es el fiscal que lleva adelante la investigación al juez federal Walter Bento. Foto: ALF PONCE MERCADO / MDZ
Dante Vega es el fiscal que lleva adelante la investigación al juez federal Walter Bento. Foto: ALF PONCE MERCADO / MDZ

MDZ habló en exclusiva con el fiscal federal Dante Vega, quien lleva adelante la investigación contra Walter Bento, el juez federal procesado y acusado de ser el líder de una asociación ilícita que cobraba coimas para otorgar beneficios a acusados por delitos federales. El Fiscal analizó en profundidad la causa y fue contundente: para él, Bento debería estar detenido. Además afirmó que la Fiscalía entiende que hay riesgo de fuga. 

La causa penal está muy avanzada, ya que los procesamientos que pesan sobre los acusados están ratificados en todas las instancias. 

-¿Cuál es el esquema general de la investigación que encabezó la Fiscalía contra el juez Bento?

-La oportunidad de hablar está más vinculada con la investigación judicial que llevamos adelante que con la instancia del Consejo de la Magistratura, los fiscales que intervenimos hemos presentado la acusación, con un texto de casi 700 hojas con todas las pruebas contra Bento y 28 imputados más en la causa. Tiene casi 50 cuerpos, 5000 fojas, 29 imputados, más de 150 incidentes, más de 100 testigos. Consideré que había llegado el momento de comunicar los detalles más importantes y aclarar algunos puntos.  Lo que se investiga en la causa es una organización  ilícita que tiene a Bento como su jefe, tiene implicadas a 10 personas con roles definidos, hay abogados, hay un policía, hay una persona que fue condenada por narcotráfico. La modalidad de esta banda tenía por fin fundamental pedir coimas a cambio de conceder beneficios judiciales, que se concentran en libertades espurias y a veces en desvinculaciones de procesos. Esta organización que viene funcionando desde hace tiempo, sospechamos que hay dos fases: una previa a la judicialización de la causa, donde se pedían coimas para evitar que se ingresaran las causas al circuito judicial y cuando ya ingresaban al circuito judicial y estaban imputadas las personas, eran contactadas o a sus familiares, a través de la mano derecha del juez Diego Aliaga, para pedirles sumas de dinero a cambio de esos  beneficios.

-¿Por qué la muerte de Aliaga es el disparador de la causa?

-En su momento no lo fue. Con el paso del tiempo, cuando la policía secuestró el teléfono de Walter Bardinella, narcotraficante que estaba prófugo, se encontró una serie de chats que revelaban manejos espurios con la Justicia Federal, ese es el comienzo de la causa. Con el devenir de la investigación ya en un principio descubrimos que Aliaga era una persona importante en este entramado delictivo. Luego definimos su rol: era la mano derecha de Bento. Cuando comienza la investigación de la causa de Diego Aliaga, despachante de aduana, surge la testimonial de quien después aparentemente sería el autor material de su asesinato: Diego Barrera, quien manifiesta en una declaración testimonial que Diego Aliaga tenía arreglos con la Justicia Federal. Ahí también se entrelaza con esas grabaciones que habían en el teléfono de este narcotraficante que hace poco fue condenado, que también era parte de la organización criminal, que era Walter Bardinella Donoso.

-¿Qué hicieron entonces?

-El fiscal federal que investigaba la situación de Aliaga tomó una serie de medidas urgentes, una de ellas era el testimonio de Barrera, que luego se transformó en imputado. El fiscal ordenó la copia de Sim Card de Aliaga ya que no aparecía. Esa información la recabó el fiscal que investigaba la muerte. En su momento a la investigación no le aportó datos relevantes y quedó reservada. La investigación nuestra comienza meses después, a raíz de un dato que dio Barrera, yo quiero aclarar que él a diferencia de lo que postula Bento, es un testigo más en la causa. No es un testigo estrella. Es Bento el que lo ha atacado de mil maneras porque ha aportado datos importantes para la causa. Es Barrera el que nos dice en la investigación nuestra, que Aliaga ocupa un rol importante en una organización delictiva comandada por Bento y que permanentemente hablaban por teléfono, cuando se comunicaban le decía "primo" al juez. Nosotros tomamos nota de esa referencia y cuando fuimos a buscar el Sim Card de Aliaga que es una prueba en otra causa, vimos que en la lista de contactos de Aliaga figuraba un "primo" y el número de teléfono era el de Bento, es una línea provista por el Consejo de la Magistratura. Eso arrojó el dato que Bento hasta ahora no ha podido explicar.

-¿Cuál era el modus operandi de Bento?

-Bento ocupaba el rol central de una banda que opera en un escenario judicial, para conceder beneficios ilícitos que promete a cambio de dinero. El ocupando el rol de juez, se mantiene en expectativas para ver qué hacen los organizadores y los abogados que son los que bajan al terreno y en las causas concretas son los que abordan a los detenidos y les piden una suma de dinero a cambio de beneficios judiciales. Cuando pagan, se activa lo que concreta Bento en la organización que él comanda, que es concretar el beneficio judicial espurio.

-¿Cuáles son las pruebas?

-Tenemos numerosos cursos probatorios, las llamadas son uno de ellos. Tenemos demostrada la relación de Bento con todos y cada uno de los integrantes de la banda, a veces esa relación es directa como con Aliaga y a veces es indirecta y a veces no se conocen. No es requisito de una banda que todos se conozcan. El estaba en la parte más alta. Nosotros hemos probado la relación a través de nueve cursos probatorios. Uno de ellos son las conversaciones telefónicas intercambiadas con Aliaga.

-En el Consejo de la Magistratura directamente negó la existencia de esas llamadas. Dijo que esas eran capturas de pantalla y que era una prueba, en cierta forma fraudulenta. El abogado de Bento en su momento dijo que solo fueron contestadas la mitad de las llamadas de Aliaga hacia Bento 

-La pregunta es: ¿Qué hace un juez hablando con un imputado de la justicia federal?

-¿Cuántos casos tienen acreditados en los que Bento otorgaba beneficio judicial?

-Tenemos 15 casos. Es difícil determinar los montos cuando se trata de acuerdo espurio, por razones obvias. Pero, los montos van desde miles de dólares a montos menores de acuerdo a los imputados y la causa. Siempre esta esta matriz: pedir dinero a gente que está detenida por causas donde hay dinero: contrabando, también hay una causa por droga, hay sobornos por temas de delitos cambiarios. Los tres fiscales que firmamos la acusación dijimos: “ Allí donde hay dinero actúa la banda". Bento no solamente opera a través de la banda que comanda, sino opera individualmente. Por ejemplo, en un caso vinculado con delitos cambiarios, los imputados Sanguedolce y Guiñazu hablaban de la plata que le correspondía a Bento para que puedan trabajar. No solamente están los dichos de los invitados grabados, sino que nosotros cuando tuvimos esa noticia fuimos a la causa penal y se advierte que el juez Bento en la causa respectiva los "deja trabajar". O sea, no hace nada. Pese a los pedidos de la fiscal federal que interviene, Bento se demora, demora los oficios al Banco Central, se equivoca a propósito.

-Cuando se abrió la investigación una de las cosas que más impactó fue el crecimiento patrimonial y sus viajes al exterior…

-Encontramos inconsistencia en su patrimonio y hay toda una línea de investigación que se relaciona con Estados Unidos, que es su destino favorito. El puede decir que es bueno con los números, pero el expediente demuestra lo contrario. Hay una pericia realizada por un perito oficial de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Hay peritos de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC).Los peritos de él cuando vieron los resultados se retiraron de la pericia. Esta última ha demostrado falta de información con respecto a sus gastos, y el perito ha puesto el acento en la inconsistencia en la información que surge de su patrimonio. La pericia determinó que no podía justificar gastos y particularmente sus viajes. Bento entre 2010 y 2020 estuvo 909 días afuera. Su esposa casi 892 días y sus hijos más de 500 días, una cantidad excesiva de viajes.

-El en el Consejo de la Magistratura, dijo que viajaba con efectivo, y pagaba sus viajes en agencias estadounidenses, el justifica que viajaba con millas, para hacerlo, primero debe pagar pasajes, con lo cual ya hay una gran inconsistencia. Nosotros publicamos en el diario que iba muy asiduamente a un departamento en Miami

-Eso lo determinamos a través de las declaraciones que introduce en la papeleta que llena para ingresar al país. Se repite al menos en 15 oportunidades, esa dirección: la Avenida Collins de Miami. A raíz de esta repetición en la dirección le pedimos a Estados Unidos que nos informará datos, todavía no los tenemos, pero ya es un elemento que llama la atención. El afirmó que pagaba los viajes en efectivo. La doctrina enseña que una de las formas de lavar dinero más sencillas es a través de pago en efectivo.

Vega, en los estudios de MDZ Radio.

-¿Cuál es su patrimonio?

-El patrimonio se ha determinado pericialmente. Tiene una casa fastuosa en el barrio Palmares, tres departamentos con sus cocheras, inversiones en un fideicomiso que se llama "Bosque de Mayo", Il Mercato, una flota de vehículos de alta gama. Incluso él explicó en un tramo de su declaración en el Consejo que estaba buscando comprar una Porsche Cayenne, en realidad es una prueba que le encontramos en su contra: encontramos en el teléfono fotos de una Porsche Cayenne, que después está demostrado que estaba a nombre de Aliaga. El movimiento de bienes es una rotación permanente, poniéndolos a nombre de sus hijos, que formaban parte de la plantilla del Poder Judicial. Hay un entramado de bienes e inmuebles, a nombre de toda la familia, una red compleja. Los peritos dicen que no se condicen con sus ingresos.

-¿Qué ha sucedido con el resto de las personas implicadas?

-Se ha avanzado con las pruebas respecto a todos. Hay cuatro personas que están detenidas en la cárcel, el resto está en prisión domiciliaria. Hemos celebrado tres acuerdos de colaboración que nos han aportado numerosos datos.

-La famosa divulgación de chats de Telegram generó un revuelo político...

-Es un juez que con la competencia electoral que posee, tiene asiduo contacto con el poder político. Nosotros pusimos en conocimiento a la Suprema Corte de Justicia, los contactos que surgían de Bento con Mario Adaro y otros. Nosotros nos concentramos en los delitos en el ámbito Federal, los contactos que tuviera con el mundo judicial era un extremo que podía salir de la causa pero que no definía lo que estábamos nosotros investigando.

-El sigue oficiando como juez. ¿Tuviste presiones por parte de Bento?

-Lo que he recibido de Bento son agravios, insultos, desmerecimiento. De un primer momento me tildó de fiscal enemigo, esto es falso. El expediente demuestra que tanto mi intervención como la de todos los magistrados que han tomado parte en esta larga causa es absolutamente regular. No hay ninguna conspiración, ni nada que se le parezca. El me ha recusado seis veces alegando este motivo y las seis veces han sido rechazadas por tres instancias. Han sido los jueces los que han determinado la falsedad de esta denuncia.

-En una de las declaraciones Bento acusó a Eduardo Puigdéngolas de corrupto porque lo había recibido en instancias previas a la imputación formal

-Esas conversaciones informales por fuera del expediente yo no ingresé. Esto es un intento de perturbación màs de Bento en esta causa. Si lo recibió el juez Federal de San Rafael, yo no quiero ingresar en este tema. No me parece de relevancia en lo que se está investigando. Lo que importa es la relevancia de lo que pudo haber dicho en el expediente. Él lo introduce para minar la figura del juez. El problema de Bento es el expediente y la gran cantidad de pruebas en su contra, intenta plantear temas que están por fuera del expediente, porque tiene problemas para defenderse de las pruebas, desmerece a los testigos.

-El argumenta que hay una confabulación mediática en contra de él

-Esto está refutado en el expediente, en donde intervienen 17 magistrados, 11 jueces de tres instancias distintas, de la cámara federal de casación, 5 fiscales, un defensor oficial. Cuando uno suma esta cantidad de magistrados que han intervenido en la causa, se cae su acusación. Cuando se le consultó quienes integraban esa conspiración, no supo contestar, balbuceo que hay una persecución política personal en su contra.

-El no quiso entregar su teléfono e inclusive se dijo que cuando ustedes estaban investigando clonó la información y borró datos

-Desde que se enteró que había una investigación en su contra, desarrolló distintas acciones de obstaculización del expediente. Depende de la actuación de la Fiscalía y entre ellas está lo que ustedes mencionan del teléfono. Ese es un episodio muy significativo porque cuando en mayo del año pasado el juez federal ordena el allanamiento de su vivienda, la orden judicial implica entregar el teléfono. Él dice "no entrego el teléfono para no auto incriminarme". Cuando termina la medida él lo que hace es borrar los contactos y los chats que tiene. Pero hay algunos que no logra borrar, que nosotros no obtuvimos de la copia del Sim Card de la línea oficial provista por el Consejo de la Magistratura para cometer delitos. Él no solamente manipula el contenido de ese teléfono para que no nos enteremos de los contactos, algunos sí nos enteramos, sino que invocando su calidad de juez intenta obtener un chip nuevo para activar la línea. Tampoco entregó el pasaporte. Yo le pedí a uno de los jueces que intervienen en la causa que entregara el pasaporte porque la Fiscalía entiende que hay riesgo de fuga. Mientras más avance la investigación más riesgo de fuga va a haber. Él dice que no entrega los documentos de viaje porque también se va auto incriminar.

-¿Cómo sigue el caso?

-Nosotros hemos determinado la necesidad del juicio enumerando una enorme cantidad de pruebas en contra de todas las personas que hemos acusado. Ahora, el juez en este momento está analizando y está pronto a resolver oposiciones en un par de posiciones laterales en contra de la acusación. Está despejado el camino para que vaya para que se radique en un tribunal oral que salga sorteado y realice el juicio oral y público que se tiene que realizar. Yo no he visto nunca que abogados y hay un imputado pidan la elevación a juicio. El que determina la necesidad de elevar la causa a juicio es el fiscal. Yo creo que en el fondo no quieren ir a juicio, es otra perturbación. Está mandando dentro de sus defensores un mensaje a futuro a los jueces que van a intervenir y ya les están advirtiendo a mi criterio, lo que les puede ocurrir si no fallan como ellos quisieran.

-¿Bento podría estar privado de su libertad en un futuro?

-Es difícil hacer esa predicción, porque no depende de nosotros. Si esto dependiera de nosotros no me cabe duda que si. Lo hemos pedido, el juez lo ha ordenado en varias oportunidades. Jurídicamente, el jefe de una banda en la que parte de sus organizados están presos, tiene que estar preso. Desde el punto de vista judicial, la solución es esa. El problema es que no depende de nosotros, depende de otro órgano. El rol del Consejo de la Magistratura y ese proceso va por otro camino, pero indudablemente en algún momento se van a cruzar.

-¿Le pasó algo en estos dos años que lleva investigando?

-Afortunadamente no. Yo siempre he estado custodiado y seguiré custodiado mientras transcurra este proceso, porque las amenazas han existido y porque no puedo dejar este extremo librado al azar.

Entrevista realizada por Marcelo Arce y Jorge Caloiro