El último gesto que Martín Guzmán espera del Fondo Monetario Internacional

Entre otras cuestiones, el ministro de Economía, Martín Guzmán, ha sido muy cuestionado tanto dentro como fuera del oficialismo por su poca capacidad de mostrar resultados positivos en lo que se refiere al manejo de la deuda pública argentina, y las trabas en las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) son un reflejo de ello. Es así que el funcionario más cuestionado por el kirchnerismo pone sus últimas fichas en lo que resulte de un futuro acuerdo con el organismo multilateral.

"Hay un problema específico de Martín Guzmán: hace del tema de la negociación con el sector privado, es decir, con los bonistas, su bandera política y académica. Esa deuda fue tan mal negociada que hoy los bonos argentinos rinden una tasa que sólo tienen activos de altísimo riesgo, como las de los que muy probablemente entren en default", comentó anoche el periodista Carlos Pagni en el programa Odisea Argentina, del canal LN+.

Pagni se refirió así a los acuerdos que la Argentina alcanzó a mediados del año pasado con los bonistas privados para la reestructuración de la deuda, un hito que fue muy celebrado por el Gobierno y que le permitió destrabar las primeras conversaciones con el FMI. Sin embargo, esa reestructuración resultó un fiasco en términos económicos, ya que el riesgo país continuó en niveles excepcionalmente elevados y las tasas de interés no bajaron, lo que restringió aún más el acceso a los mercados internacionales de crédito.

De todos modos, Martín Guzmán "espera que el Fondo no descalifique esa negociación, pero es muy difícil que en el acuerdo con la Argentina pueda decir que esa deuda es sustentable con alta probabilidad, una fórmula prevista para cuando los bonos que emite un país son de alta calidad y no presentan riesgos".

Este escenario sombrío se debe a que "los bonos argentinos hoy presentan un riesgo de default, como si dentro de 5 años fuéramos a entrar en cesación de pagos e hiciera falta otra negociación como la que se hizo el año pasado", consideró el conductor.

"Acá se juega el prestigio de Martín Guzmán frente al espejo, y esto también está demorando la negociación", concluyó.