Las sorpresas y los cambios de la reforma

La reforma judicial impulsada por el kirchnerismo fue aprobada por el Senado con algunas polémicas, con cambios ejecutados de manera virtual y también arreglos de errores burdos que tenía el despacho original. También se hicieron oficiales los pedidos de los gobernadores aliados y otros detalles. 

Entre las reparaciones que se hicieron, por ejemplo, los juzgados federales de San Rafael vuelven a depender de la Cámara Federal de Mendoza y no de la "nueva" Cámara Federal de San Luis. Ese error daba cuenta del vértigo con que se había armado el despacho que se trató en el Senado: le agregaron textos y artículos "a pedido" que hicieron cometer yerros insólitos, como sacarle la jurisdicción territorial a una Cámara local. 

Con el despacho aprobado, muchas provincias tendrán su propia Cámara y burocracia para casos federales. Más allá del derecho que pueda asistirle a los ciudadanos de algunas provincias para agilizar la llegada a un tribunal de alzada, en la Justicia analizan algunos datos que ponen de relieve que se puede crear una "máquina burocrática ociosa". San Luis tendrá su propia Cámara Federal para ser tribunal de apelación y "no depender de Mendoza" como pidieron los hermanos Rodríguez Saá. Ese organismo tendrá, por ley, 14 cargos (tres jueces entre ellos) y al menos otros 15 empleados.

En un cálculo rápido, costaría no menos de 8 millones de pesos solo de sueldos por mes (con cargas incluidas).  Pero todos tendrán poco volumen de trabajo: el año pasado solo se trataron 155 causas penales provenientes de San Luis en la Cámara Federal. San Rafael, que seguirá dependiendo de Mendoza tuvo 170. San Juan 614 y Mendoza en total 2162. "La Cámara de Mendoza tiene las causas al día", explican en Tribunales de calle España. El modelo de San Luis se replica en otros distritos como Catamarca, Jujuy, Santiago del Estero, Formosa y varias localidades de Buenos Aires. Desde la oposición aseguran que son cerca de 900 los cargos que se crearían en todo el país.

Una de las maniobras del oficialismo fue la inclusión y el retiro de la "cláusula Parrilli" que incluía a los medios como factores de presión a los jueces. Ese concepto fue retirado. Pero lo que generó ira fueron los argumentos del propio senador neuquino que oficia de vocero de las ideas de Cristina. Parrilli dijo que ese artículo fue "un anzuelo", casi una picardía para generar la reacción de los medios "y sus voceros", como ufanó el senador. 

La discusión de fondo 

Lo que se discutió en el Senado no fueron los recursos, sino el poder que las Cámaras tendrán y, principalmente, la designación. Quien logre poner alguna impronta en los nombramientos, puede tener una llave de poder enorme. La nueva maquinaria judicial tendrá un volumen enorme y con un nuevo esquema de control. 

La reforma tiene como eje la creación de juzgados y tribunales que generarán una "refundación" de la justicia penal con personas nuevas y un maremoto de designaciones en los próximos meses. Se fusionan los 12 juzgados del fuero Criminal y Correccional con los 11 del Penal Económico en Buenos Aires, se crean 23 nuevos juzgados penales para llevarlos a 46. La clave es la subrogancia de esos nuevos juzgados, que hasta por un año y medio pueden ser ocupados por jueces suplentes. En las provincias también habrá un shock porque se crean cientos de cargos.

Solo en Mendoza habrá tres juzgados federales nuevos, que se suman a los que hay vacantes y que deberán ser designados. "Una vez que se cuente con el crédito presupuestario necesario para la habilitación de los Juzgados cuya creación dispone el presente Título y se encuentren en trámite los concursos para cubrir las vacantes correspondientes, se procederá a designar jueces y juezas subrogantes de conformidad con lo dispuesto en los artículos 16 y 17 de la presente ley. Asimismo, se aplicará la Ley 27.439 en tanto no resulte contraria con lo que se dispone en la presente sección", dice el artículo 15 del proyecto. 

Dentro de Tribunales federales la pelea no pasa desapercibida porque se cambian competencias y roles. Y todos especulan sobre cómo impactará la nueva ley.