Grabaron una brutal batalla campal a la salida de un boliche en Entre Ríos

Dos jóvenes fueron agredidos a botellazos en medio de una batalla campal ocurrida a la salida de un boliche en la ciudad entrerriana de Paraná. Las víctimas tienen 23 y 24 años y los agresores no fueron identificados. Asimismo, una menor de edad terminó inconsciente a raíz de la ingesta excesiva de alcohol.

El hecho ocurrió el sábado alrededor de las 5:20 en la Peatonal San Martín, entre España y Urquiza, donde un grupo de jóvenes se peleó por causas que se desconocen y dos de ellos terminaron agredidos a botellazos en la cabeza. La batalla campal fue captada por los teléfonos celulares de otros chicos, y en un momento del video se escucha el grito desesperado de varias adolescentes por los incidentes que se producían.

Uno de los heridos sufrió una herida cortante en el cuero cabelludo y tuvo que ser derivado al hospital local, donde se constató que sufrió traumatismo de cráneo, sin lesiones óseas. Por su parte, efectivos de las comisarías primera y segunda de la Policía de Entre Ríos aún investigan el hecho mientras que tratan de identificar a los agresores, quienes se retiraron del lugar ocultándose en la multitud.

Por su parte, dos ambulancias del sistema médico arribaron a la zona y trasladaron a los heridos hacia el Hospital San Martín para su pertinente evaluación. Sobre las lesiones que sufrieron los dos jóvenes se supo que uno de 24 años sufrió traumatismo de cráneo, sin lesiones óseas o de gravedad, y se retiró de alta médica, mientras que el otro, de 23, no fue llevado al centro asistencial ya que se negó a las curaciones pese a que fue asistido por personal médico.

Luego del tumulto, la Policía procedió a la desconcentración de personas, pero ninguno de los lesionados radicó la denuncia, indicaron desde la Comisaría Primera. Asimismo, una adolescente de 15 años se encontraba inconsciente por la ingesta de alcohol dentro del Club Social y tuvo que ser derivada en ambulancia a la sala de emergencia del hospital, donde se le colocó suero y permaneció en Sala de Guardia.