Narcos sin control: ataque con impronta mafiosa en Tribunales de Rosario

El Centro de Justicia Penal de Rosario fue atacado a balazos el miércoles a la noche en el marco de un ataque mafioso vinculado al comienzo del juicio contra el jefe de la banda Los Monos, Ariel "Guille" Cantero.

El ataque se registró anoche, a las 23.15, cuando dos hombres en moto llegaron hasta el lugar y dispararon contra el frente del edificio ubicado en la esquina de Sarmiento y Virasoro.

No es el primer atentado contra edificios del Poder Judicial como represalia por las investigaciones contra la organización criminal Los Monos que se registra en Rosario.

Los investigadores creen que el ataque está vinculado al comienzo del juicio contra "Guille" Cantero, ya que tiene el sello mafioso propio de la organización criminal que lideraba.

Los efectivos de la Policía que concurrieron al lugar observaron dos impactos de bala en el vidrio del edificio. Sin embargo, en las adyacencias de la sede judicial rosarina levantaron al menos siete vainas servidas de calibre 9 milímetros. 

El ataque pudo haber terminado en tragedia a raíz de que en una de las veredas del Centro de Justicia Penal había instalada una carpa de familiares que reclaman justicia por una víctima fatal de un accidente vial ocurrido en 2016.

El juicio contra "Guille" Cantero comenzará mañana a las 7.30. Además de Cantero, serán juzgados otros seis imputados, acusados de perpetrar una serie de atentados a balazos cometidos durante 2018 contra distintos objetivos vinculados al Poder Judicial. Los fiscales del caso solicitaron 24 años de prisión para el jefe narco, al considerar que fue el ideólogo de estos hechos.

Según consigna el diario La Capital de Rosario, el juicio se extenderá durante varias jornadas y estará a cargo del tribunal conformado por los jueces Hebe Marcogliese, Rafael Coria y Pablo Pinto, quienes analizarán la prueba sobre una decena de hechos cometidos entre mayo y agosto de 2018.

En total se investigan más de 10 balaceras contra edificios oficiales, además de las cometidas contra los domicilios de los funcionarios judiciales que investigaron a la peligrosa organización narco rosarina.