Recetas

Disfruta de las mejores galletas de jengibre con esta receta sencilla

Aprende paso a paso y fácilmente a preparar unas deliciosas galletas de jengibre con nuestra receta favorita e imbatible.

Napsix martes, 10 de diciembre de 2024 · 16:02 hs
Disfruta de las mejores galletas de jengibre con esta receta sencilla
Galletas de jengibre: receta tradicional con sabor especiado Foto: Shutterstock

Las galletas de jengibre son un delicioso y cálido clásico que se asocia especialmente con la temporada navideña, aunque su sabor especiado es perfecto para disfrutar durante todo el año. Su origen se remonta a siglos atrás, cuando se usaban especias como el jengibre, la canela y el clavo para conservar los alimentos y darle un toque exótico a las recetas. En la actualidad, las galletas de jengibre no solo son un manjar irresistible, sino también una tradición que llena de alegría las celebraciones familiares.

El uso de jengibre en la repostería data del siglo XI en Europa, donde se creía que tenía propiedades medicinales y conservantes. Fuente: Shutterstock

Con su característico sabor dulce y picante, estas galletas ofrecen una combinación perfecta entre suavidad y crujiente, lo que las convierte en una opción ideal para regalar, compartir en fiestas o simplemente disfrutar en una tarde de invierno acompañadas de una taza de o chocolate caliente. Además, las galletas de jengibre son fáciles de preparar y permiten una gran variedad de decoraciones, desde simples cubiertos con azúcar glass hasta complejas creaciones de glaseado y confites. ¡Vamos a la receta!

Las primeras galletas de jengibre se hicieron en la Edad Media y se utilizaban en las cortes reales, especialmente en Inglaterra y Francia. Fuente: Shutterstock

Ingredientes

350 g de harina de trigo, 1 cucharadita de bicarbonato de sodio, 1 ½ cucharaditas de jengibre en polvo, 1 cucharadita de canela en polvo, ¼ cucharadita de clavo de olor molido, ¼ cucharadita de nuez moscada rallada, ½ cucharadita de sal, 170 g de mantequilla a temperatura ambiente, 100 g de azúcar moreno, 1 huevo grande, 120 g de melaza o miel oscura, 1 cucharadita de esencia de vainilla, azúcar glass (opcional, para decorar).

 

Procedimiento

  1. Comienza tamizando la harina de trigo en un bol grande. A continuación, agrega el bicarbonato de sodio, el jengibre en polvo, la canela, el clavo, la nuez moscada y la sal. Estos ingredientes secos son los responsables de darle a las galletas su sabor especiado y su textura crujiente. Reserva esta mezcla.
  2. En otro bol, bate la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar moreno utilizando una batidora de varillas o a mano con una espátula. Bate hasta que la mezcla esté suave y cremosa, lo que suele tardar entre 3 y 5 minutos. La mantequilla debe estar completamente incorporada con el azúcar, sin grumos, para que las galletas tengan una textura homogénea.
  3. Agrega el huevo a la mezcla de mantequilla y azúcar y bate hasta que se incorpore bien. Luego, agrega la melaza o miel y la esencia de vainilla, mezclando nuevamente hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. La melaza es un ingrediente clave en esta receta porque le da a las galletas un sabor profundo y ligeramente dulce, además de una textura suave.
  4. Poco a poco, agrega la mezcla de ingredientes secos al bol con los ingredientes húmedos. Hazlo en dos o tres adiciones para asegurarte de que la masa se forme correctamente. Es recomendable hacerlo con una espátula o una cuchara de madera al principio para evitar que el polvo se derrame.
  5. Una vez que la masa esté formada, es importante que la dejes reposar en el refrigerador durante al menos 1 hora. Esto ayudará a que la masa se endurezca, lo que hará que sea más fácil de manejar y cortarla en formas. Si tienes prisa, puedes enfriarla por 30 minutos, pero lo ideal es que repose una hora para obtener las mejores galletas.
  6. Pasado el tiempo de reposo, saca la masa del refrigerador. Coloca una hoja de papel de hornear sobre la superficie donde vas a trabajar y espolvorea ligeramente con harina. Divide la masa en dos partes para facilitar el trabajo. Con un rodillo, extiende la masa hasta que tenga un grosor de unos 5 mm.
  7. Utiliza cortadores de galletas con formas tradicionales de jengibre, como muñecos, estrellas o círculos. Asegúrate de no hacerlas demasiado finas, ya que podrían romperse durante la cocción. Si la masa se calienta demasiado y se vuelve pegajosa, vuelve a refrigerarla durante unos minutos antes de continuar cortando.
  8. Precalienta el horno a 180 °C (350 °F). Coloca las galletas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, dejando espacio entre ellas. Hornea durante 8-10 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados. No te preocupes si al principio parecen blandas, se endurecerán al enfriarse.
Las galletas de jengibre no solo se hacen en forma de muñecos, sino también en formas de estrellas, corazones, animales y otros símbolos festivos. Fuente: Shutterstock

Deja que las galletas se enfríen en la bandeja durante unos 5 minutos antes de transferirlas a una rejilla para que se enfríen completamente. Si deseas decorar las galletas, puedes hacerlo con azúcar glass o glaseado real una vez estén completamente frías. ¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.

Archivado en