Geranios: todo lo que necesitas saber sobre los cuidados y poda de esta resistente planta

El poder ornamental de los Geranios difícilmente pueda ser encontrado en otra planta. Sus flores de vívidos colores son muy utilizadas para decorar balcones, terrazas y jardines. Además, es una planta muy resistentes a las condiciones climáticas y pueden vivir durante años si se la cuida adecuadamente. Conoce en esta nota algunos trucos para su cultivo. 

El término "geranio" corresponde a un género que agrupa a más de 400 especies reconocidas, aunque las descriptas superan las 1.000. Dentro de este conjunto pueden encontrarse vegetaciones perennes, anuales o bianuales. La ciencia no ha podido determinar de qué lugar son originarios debido a que su amplia presencia en diferentes zonas templadas del mundo, incluso, en zonas montañosas.

La popularidad de esta planta es indiscutida, aunque no se la debe confundir con los malvones ya que estos últimos forman parte de otra familia. 

Cuidados que necesita un geranio

Su alto requerimiento de luz es lo que ha convertido a esta especie en los "reyes de los balcones". Es que, soportan mucho más que otras plantas los rayos del sol, sin embargo, las zonas de semisombra no impactan en gran medida en su floración. Además, si bien la temperatura ideal para su cultivo se encuentra entre los 18° y 20°, largos periodos de mucho calor no acabarán con ellos.

Los geranios necesitan de humedad, pero no se llevan nada bien con el exceso de agua. Es por esto, que el riego se debe amoldar a las zonas y estaciones en donde nos encontramos. También se debe procurar que las macetas tengan un buen drenaje y los suelos sean algo arenosos. 

Con respecto a este último punto, un dato no menor es la calidad del sustrato. Este será mucho más agradable si tiene un pH ligeramente ácido y se le incorpora materia orgánica al menos tres veces al año -primavera, verano y otoño-, debido a que los nutrientes que no le pueden faltar son el nitrógeno, fósforo y potasio. 

Poda de los geranios

Debido a su importante capacidad de crecimiento, la poda generalmente se realiza para poder mantener su forma y que la planta no se degenere, aunque no es un requerimiento propio de la especie. Pero sí se debe tener en cuenta que un raleo de las hojas secas o en mal estado es una técnica muy beneficiosa ya que estaremos disminuyendo los riesgos a enfermedades y hongos.

En otoño será la época más adecuada para intervenir la planta, se deberán quitar todas las flores marchitas y las ramas que se crucen para estimular el ingreso de oxígeno. Se priorizará cortar las partes que no estén en buen estado o luzcan débiles.