Trucos sencillos para que la ropa no destiña cuando la lavamos

Al cargar el lavarropa puede que, en algún momento, una prenda se nos “escape”, destiña y termine manchando al resto. Esta es una situación por demás molesta y podemos creer que hemos estropeado ropa que nos interesa mantener en buen estado. Para que esta situación no se vuelva a repetir puedes aplicar sencillos trucos a la hora de limpiar tu indumentaria.

Un pequeño calcetín o media puede terminar arruinando toda tu rutina de lavado y complicar seriamente tu día. Para que esto no ocurra, lo primero que debes tener en cuenta es analizar con cuidado las prendas nuevas o las de colores más vivos.

Primero se hará un simple paso que puede salvar tu ropa. Pon bajo un chorro de agua caliente o sumerge en un recipiente durante algunos minutos aquella prenda que te haga sospechar. Si el agua se tiñe o la espuma se colorea entonces es un peligro inminente.

Para no tener que estar pendiente de ella, se la puede someter a un prelavado. Esto impedirá que la tela o el tejido se destiña. Solo se necesita un recipiente con 50 gramos de sal por cada litro de agua fría.

Allí se dejará en remojo por al menos unos 30 minutos, no mucho más, siempre de lado del revés y luego lavar. Es recomendable que al menos los primeros tres lavados se hagan de esta forma para asegurarnos que no vuelva a manchar.

El vinagre blanco también te ayudará a que el tinte de la ropa permanezca en las telas y no deje rastros cada vez que la metemos en el lavarropa. Coloca una taza de vinagre en un recipiente amplio y llénalo con agua fría. Sumerge y deja reposar durante 20 minutos. Después se debe enjuagar y lavar normalmente.