Alerta en Europa: dos países de la OTAN denuncian intervenciones de Rusia en sus espacios aéreos
En la última semana, dos países miembros de la OTAN llamaron a consultas en virtud del Artículo 4 de la organización tras la intromisión de Rusia en sus espacios aéreos.

La tensión en el flanco oriental de la OTAN volvió a escalar este viernes luego de que Estonia y Polonia denunciaran la violación de su espacio aéreo por parte de cazas provenientes de Rusia. La Alianza Atlántica intervino de inmediato para interceptar a las aeronaves, mientras la Unión Europea calificó la maniobra como una “provocación extremadamente peligrosa”.
Qué sucedió entre los países de la OTAN y Rusia
En esta ocasión tres MIG-31 ingresaron al espacio aéreo estonio durante 12 minutos sobre el golfo de Finlandia. La interceptación estuvo a cargo de aviones F-35 italianos desplegados en la base de Ämari.
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No obstante, horas más tarde, Polonia informó que dos cazas rusos sobrevolaron la zona de seguridad de la plataforma de perforación Petrobaltic en el mar Báltico.
Las reacciones de los líderes mundiales a la escalada de tensión con Rusia
El canciller estonio, Margus Tsahkna, consideró la incursión como un acto de “desfachatez sin precedentes” y aseguró que su país pedirá consultas con la OTAN en virtud del Artículo 4 del Tratado. La vocera de la Alianza, Alison Hart, sostuvo que la respuesta rápida demuestra la capacidad de reacción frente a lo que describió como un “comportamiento imprudente” de Moscú.
Bruselas también elevó el tono. La jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, advirtió que la tercera violación en pocos días agrava las tensiones y llamó a reforzar sanciones. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, reclamó aprobar con rapidez un nuevo paquete de medidas contra Rusia: “Responderemos a cada provocación con determinación”.
Desde Kiev, el ministro de Exteriores, Andrii Sibiga, denunció que la maniobra representa “otra amenaza directa a la seguridad transatlántica” y pidió una reacción firme para frenar la agresividad del Kremlin. En tanto, el primer ministro polaco, Donald Tusk, sostuvo que se trató de una incursión deliberada, aunque Moscú lo negó.
El episodio coincide con la propuesta de la Comisión Europea de adelantar un año la prohibición de comprar gas natural licuado ruso, como parte del decimonoveno paquete de sanciones contra Moscú. La medida busca debilitar los ingresos energéticos del Kremlin, mientras crecen las presiones de Estados Unidos para aislar aún más al gobierno de Vladimir Putin.