El nuevo descubrimiento arqueológico en Italia que deja mucho de qué hablar

Arqueólogos realizaron nuevos descubrimientos en las termas de San Casciano dei Bagni, ubicadas en la región de Toscana, Italia. Este sitio, que tiene su origen en el siglo III a.C. como un santuario, fue transformado por los romanos en el complejo termal conocido como Balnea Clusinae. Ya en excavaciones previas se encontró una colección de 24 estatuas de bronce datadas entre los siglos II y I a.C., que aparentemente fueron depositadas junto con ofrendas votivas en honor a las deidades.

Ahora, una nueva investigación centrada en el temenos, la muralla sagrada que rodea el sitio, y en el complejo principal del templo, permitió identificar nuevas ofrendas.

Entre los objetos recuperados se encuentran lámparas, frascos de vidrio para ungüentos, figurillas de bronce, piezas anatómicas elaboradas en terracota pintada y una placa con inscripciones bilingües en etrusco y latín.

Dentro de las estatuas destaca una figura de serpiente de casi un metro de longitud, que los investigadores interpretaron como una representación de Agatodemon, una deidad serpentina de la mitología griega.

Otros descubrimientos incluyen miles de monedas, una corona de oro, estatuas de bronce de figuras masculinas y femeninas, ramas decoradas con plantas y piñas, y fragmentos de cáscaras de huevo, además de huevos completos que se encuentran en un estado de conservación excepcional.

En paralelo a las investigaciones arqueológicas, se iniciaron acciones para proteger y poner en valor el sitio. Estas incluyen la creación del Museo Nacional Arqueológico de San Casciano dei Bagni en el Palacio del Arcipreste y el desarrollo de un parque arqueológico termal en torno al área de Bagno Grande.