Líderes mundiales

Polémica histórica: Rusia reinvindica la figura del controvertido José Stalin

El recordado líder de la Unión Soviética, ahora, sale de la cancelación y es recuperado, incluso, en los manuales escolares rusos. Por el contrario, la figura de Vladímir Lenin cae en desgracia.

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MDZ Mundo viernes, 19 de enero de 2024 · 06:57 hs
Polémica histórica: Rusia reinvindica la figura del controvertido José Stalin
Estalinistas con banderas de la URSS y retrato de Josif Stalin en una reciente celebración en Rusia. Foto: Efe.

La historia dice que José Stalin fue "un político, revolucionario y dictador soviético de origen georgiano, secretario general del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética entre 1922 y 1952, y presidente del Consejo de Ministros de la Unión Soviética entre 1941 y 1953. Aunque inicialmente presidía un liderazgo colectivo como primero entre iguales con Lev Kámenev y Grigori Zinóviev, a los que ejecutó posteriormente, hacia los años 30 ya se había convertido en líder de facto de la Unión Soviética". 

Ahora, Rusia parce quitar la 'cancelación' que rige sobre este líder histórico. Así, pues, la guerra en Ucrania ha impulsado la rehabilitación de la controvertida figura de José o Iósif Stalin, que condujo a la Unión Soviética a la victoria sobre la Alemania nazi, maquillando el lado oscuro del dictador.

"Ahora el nombre de Stalin, el recuerdo de la guerra y la URSS se utilizan con un solo objetivo: convencer al pueblo ruso de que la operación militar especial en Ucrania es tan justa como la Gran Guerra Patria", comentó a EFE Yákov Dzhugashvili, bisnieto de Stalin.

La rehabilitación de Stalin coincide con el centenario el domingo de la muerte del líder de la Revolución Bolchevique, Vladímir Lenin, al que el actual jefe del Kremlin, Vladímir Putin, culpa de muchos de los males que desembocaron en la desintegración soviética.

Blanqueamiento en los manuales de historia 

El blanqueamiento comienza con los libros de historia. Los nuevos manuales para los estudiantes de los dos últimos cursos de la secundaria muestran una imagen del dictador totalmente diferente a la de los textos publicados tras la caída de la URSS.

"Si en los libros financiados en los años 90 por la Fundación Soros, era un tirano, una bestia, un pésimo comandante (...), hoy en nuestro manual unificado el papal de Stalin se presenta de manera adecuada, es decir, objetivamente", explicó Mijaíl Miagkov, director de la Sociedad Histórico-Militar de Rusia.

Los manuales admiten las brutales purgas estalinistas, pero las enmarcan en una difícil situación internacional y en los temores a una conspiración trotskista y la aparición de una quinta columna. 

Al mismo tiempo, los textos destacan que, como el pueblo desconocía la "auténtica magnitud" de la represión, "la popularidad de Stalin entre la gente no sólo se redujo, sino que creció aún más".

Apenas hace referencia a los GULAG, aunque admite el fusilamiento de más de 800.000 personas, y niega el genocidio por hambruna en Ucrania (Holodomor) durante la colectivización forzosa de la tierra, pero utiliza esa palabra para la matanza de judíos polacos a manos de los nacionalistas ucranianos.

Stalin aprobó el pacto Mólotov-Ribbentrop no para repartirse esferas de influencia con Hitler, sino para aplazar la agresión alemana, debido a la política de apaciguamiento occidental de Berlín y para alejar la frontera soviética varios cientos de kilómetros de Moscú.

Y concluye que el principal resultado de las acciones de Stalin, al que exculpan por purgar al generalato e invadir Finlandia, "fue la derrota de la Alemania hitleriana y de Japón, y la eliminación de la amenaza fascista para toda la humanidad".

Stalin vuelve a las calles rusas 

Desde que Putin llegara al poder en el año 2000 se han instalado casi un centenar de monumentos en honor de Stalin, tendencia que se aceleró desde la anexión de la península ucraniana de Crimea (2014) y se disparó en los últimos dos años..

Aunque dos tercios de sus habitantes se opone a ello, las autoridades de Volgogrado se proponen recuperar la idea de celebrar un referéndum para devolverle el nombre de Stalingrado a la ciudad, consulta en la que podrán votar no sólo los residentes de la ciudad, sino de toda la región.

En la patria chica del tirano georgiano también estalló estos días un escándalo por la aparición de un icono con su imagen en la catedral de Tiflis, que fue retirado posteriormente por la Iglesia, que negó un encuentro milagroso entre el dictador y la santa Matriona de Moscú.

“Lo importante no es Stalin sino la causa por la que dio su vida, la auténtica democracia que se llama Comunismo. ¿Acaso en Rusia alguien pretende rehabilitar la idea de la auténtica democracia, el comunismo?”, insiste el bisnieto de Stalin. 

Video: Vladimir Putin amenaza a Occidente con usar armas nucleares 

Efe, Youtube

 

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