Se venga de su esposo violador y muere y, luego, aún así, la ahorcan

En Irán, una mujer es ahorcada después de morir de un ataque al corazón. No obstante, la ejecución de la asesina sigue adelante con el cadáver. Lo hicieron para que la madre del hombre muerto, un funcionario de inteligenbcia, pudiera ejercer su derecho a patear una silla debajo de ella. 

Zahra Ismaili fue condenada por matar a su esposo. Su abogado afirmó que el marido había abusado de ella y de su hija. La mujer se desmayó y murió mientras esperaba, detrás de 16 hombres condenados para ser ahorcados. Igualmente la ahorcaron, bajo la ley "sharia de qisas" (ojo por ojo), para complacer a la madre de la víctima.  

El abogado de la mujer, Omid Moradi, describió en línea cómo la madre de dos niños se vio obligada a esperar en la fila en la horca detrás de 16 hombres condenados y observar cómo los ahorcaban. Entonces, Ismaili se desmayó y sufrió un infarto, pero la subieron al andamio y la colgaron de una soga para que la madre de la víctima pudiera patear una silla de debajo de sus piernas sin vida.

Ismaili fue ahorcado en la brutal prisión de Rajai Shahr, a unas 20 millas al oeste de Teherán, informó Daily Mail.

La República Islámica ocupa el segundo lugar en ejecuciones por pena de muerte, sólo detrás de China. Pero incluso para los estándares de Irán, una ejecución masiva de 17 personas en un día es poco común. 

Naciones Unidas registró 233 ejecuciones el año pasado, hasta principios de diciembre, incluidas tres que eran adolescentes en el momento de sus presuntos delitos.

El ahorcamiento del joven de 26 años generó una condena internacional generalizada. 

DailyMail.