Jésica Cirio recibió lapidarios comentarios de su padre al ver un informe de los millonarios lujos de la modelo
Luego de la detención de su exmarido, Elías Piccirillo, y el escándalo por sus millonarios bienes, Jésica Cirio fue criticada duramente por su padre.
Un reciente informe del ciclo Puro Show (El Trece) reveló el extravagante estilo de vida de Jésica Cirio, destacando la adquisición de carteras de alta gama que, según estimaciones, superarían los 600 mil dólares en inversión. Este despliegue de lujo contrasta con la difícil situación que atraviesa su padre, Horacio Cirio, quien reaccionó con enojo al ver el programa.
El hombre no ocultó su malestar al referirse a los excesos de Jésica Cirio, especialmente mientras él libra una batalla legal para recuperar su propiedad, actualmente ocupada por su exesposa y su nueva pareja. "Empiezo a escuchar el tema de las carteras. A mí me están negando algo que es mío, yo siento que me robaron mi casa. Está mi ex con un chabón hace muchos años", expresó con indignación.
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Respecto a su relación con la modelo, Horacio Cirio fue contundente: "Yo no rompí ninguna relación, ella rompió. Yo me fui con lo puesto de mi casa". Además, cuestionó el desapego de Jésica hacia su familia: "Para ella no existo ni yo ni su hermano, no le importó de la muerte de su hermana. Vi cómo y dónde y de qué manera está enterrada su hermana, es denigrante".
El padre de Jésica Cirio expresó su malestar luego del informe de Puro Show
Jésica se ha caracterizado por ser vinculada con hombres de alto poder adquisitivo, como el político Martín Insaurralde o Elías Piccirillo, que pasó de ser un desconocido a transformarse en un acaudalado financista en muy poco tiempo, para luego caer en prisión. El padre de la mediática también lanzó duras críticas sobre el origen de su fortuna: " Todos dicen que lo hizo con dinero del pueblo". Reclamó, además, una compensación económica simbólica: "Mi casa estaba valuada en 160 mil dólares, que me den la mitad, serían 3 o 4 de las cosas que tienen ella".
Pese al distanciamiento, Horacio aseguró que el vínculo sanguíneo persiste: "Sigue siendo mi hija hasta el día que yo me muera, es la hija de Don Cirio. No se puede borrar, así lo quiso el destino". Sus palabras reflejan una mezcla de dolor, frustración y un lazo familiar que, aunque fracturado, aún perdura.