Kate y Pippa Middleton: ¿cómo es realmente la relación entre las hermanas?
Los verdaderos motivos de la cercanía y la rivalidad de las hermanas Middleton.
Nacidas con diferencia de un año, las hermanas Kate y Phillipa “Pippa“ Middleton están unidas tanto por el amor y como la competencia, ingredientes naturales de cualquier hermandad. Pero ¿cuáles son los motivos?
Infancia unida y después
Hijas de un piloto de avión y una azafata de vuelo, su familia envió a escuelas privadas de renombre a sus tres hijos, también al pequeño James Middleton, el hermano menor. Son tan cercanas que cuando a los 9 años Kate pidió a sus padres que la enviaran a la escuela de Saint Andrews en modalidad de internado, Pippa la siguió.
De esta manera, pasaban cinco días a la semana juntas, alejadas del grupo familiar, por lo que se unieron aún más que en los primeros años de la infancia. En el internado practicaban deportes y aprendieron a tocar el piano y la flauta dulce. Incluso cuando Pippa demostró ser una excelsa deportista y la mejor estudiante del instituto, Kate se convirtió en su mayor fan.
Un instructor del instituto al que ambas asistieron en edad escolar declaró que ambas tenían un espíritu competitivo pero nunca una contra la otra y que “formaban un gran equipo“.
Más tarde, con cada cambio de colegio de Kate, Pippa quizo seguir a su hermana nuevamente y concurrieron juntas a dos colegios más, completando toda la escolaridad, hasta finalizar la preparatoria.
Madurez y rumbos distintos
Sus caminos se separaron cuando la ahora Duquesa de Cambridge decidió tomar un año sabático antes de concurrir a la universidad en Escocia, donde su príncipe la esperaba. Para esa época hablaban menos y Kate comenzó a "noviar" con el príncipe Willliam mientras Pippa se titulaba en la universidad de Literatura inglesa.
En 2011 ocurre la boda entre Kate y William y Pippa se convierte en un titular internacional frecuente, sumando presión a la relación. La fascinación de la prensa con la figura de la hermana de la duquesa era inmensa. Todas las publicaciones tenían bajo la lupa el vínculo de las hermanas, el vestuario y su papel en la boda, los gestos en las fotos y se dedicaron a escarbar en su pasado.
Más aún cuando Kate rompió los protocolos reales y la tradición cuando nombró a su hermana como dama de honor. Normalmente en las bodas reales este papel lo ocupan niños.
Aquel fue un escándalo recordado, cuando las redes sociales y la prensa se dedicaron, al día siguiente del enlace real, a criticar el vestido escotado y blanco que había lucido Pippa, colocándola en el centro de la escena. Muy lejos del lugar supuestamente inadvertido que debía ocupar.
“Ha sido difícil pasar de una vida normal a manejar todo lo que sucedió desde la boda de mi hermana“, había declarado Pippa entonces. Además, admitió que tuvo acceso y oportunidades únicas gracias a eso pero que, sin embargo, le resultaba “complicado“ por sentirse “intimidada públicamente“. Y añadió: “he leído muchas cosas que no son ciertas sobre mí“.
Pasar tiempo juntas, tomar un café o ir de compras ya no se volvía una opción para las hermanas que tienen tanta historia en común, con la mayor de las hermanas atrapada en las tradiciones familiares de sus suegros y la Corona como prioridad.
Pippa, casi tan privilegiada como su hermana
Aunque tuvo que desestimar una incipiente carrera televisiva que se le presentó por la fama sorpresiva que le trajo la situación matrimonial de su hermana, Pippa muy pronto encontró con qué entretenerse.
A su vida llegó el amor cuando en un viaje al caribe conoció al multimillonario James Matthwes y se casó con él en 2017. Junto a él será madre por segunda vez este año.
No obstante, en el casamiento de Pippa la duquesa no le devolvió el favor de ser dama de honor. Quizás porque sabía lo que se sentía no ser la gran protagonista de la propia boda.