Queso crema saborizado: 3 opciones fáciles y exquisitas

¿Te encanta el queso crema saborizado y estás buscando nuevas recetas para probar? A continuación, compartimos 3 opciones fáciles y exquisitas, tan simples de hacer como rápidas.

Se trata de la opción ideal para acompañar distintas comidas, desde entradas hasta platos principales, pasando obviamente por todo tipo de tentempiés.

Antes que nada, es importante destacar que las cantidades que se mencionan a continuación son más bien orientativas. Dicho de otra manera, de trata de recetas versátiles que pueden ser adaptadas con suma libertad, buscando distintas intensidades de sabores.

Queso crema saborizado: 3 opciones que no deberías perderte por nada del mundo 

1. Queso crema con ajo y jamón cocido. 

Ingredientes. 

• 200 gr. de queso crema.
• 100 gr. de jamón cocido.
• 1 diente de ajo. 

Elaboración.

Picar el jamón cocido y el ajo en trozos bien pequeños. Luego, mezclar con el queso crema y dejar reposar un rato para que los sabores se unan entre sí. Más fácil, imposible, ¿no?

Un secreto: en vez de jamón cocido, se puede utilizar jamón crudo. El resultado es un queso crema saborizado mucho más intenso. 

2. Queso crema con semillas de girasol. 

Ingredientes. 

• 200 gr. de queso crema.
• 50 gr. de semillas de girasol (se puede usar más).
• 1 cucharada de aceite de oliva.
• Zumo de ½ limón.
• Sal (a gusto). 

Elaboración. 

Lo primero que hay que hacer es poner en remojo las semillas de girasol. Dejarlas en agua entre 8 y 12 horas.

Luego, introducir en un bol las semillas, el queso crema, el zumo de limón, el aceite de oliva y la sal. Procesar hasta obtener una mezcla homogénea y agregar un poco de agua para lograr la consistencia adecuada.

¿Un consejo? Se pueden agregar otros condimentos para darle más sabor, como ajo, cebolla en polvo y cúrcuma. En cuanto al limón, si se quiere un gusto más ácido, se puede usar el zumo de 1 unidad entera. 

3. Queso crema de ricota y orégano. 

Ingredientes. 

• 250 gr. de ricota.
• Aceite de oliva (a gusto).
• Orégano (a gusto).
• Sal (a gusto).
• Pimienta (a gusto).
• Ají molido (a gusto). 

Elaboración. 

Usar una licuadora de mano para lograr que la ricota adquiera la consistencia propia del queso crema. Agregar el aceite de oliva necesario para lograr la textura adecuada y condimentar con el orégano, la sal, la pimienta y el ají molido.

¿La clave? Usar orégano natural para lograr un sabor único e indescriptible. Eso sí, tener cuidado de lavarlo bien y de cortarlo en trozos bien pequeños.

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