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La microbiota intestinal: una aliada clave para el crecimiento y desarrollo infantil

Desde el nacimiento, la microbiota intestinal influye en el crecimiento, la inmunidad y el metabolismo infantil.

Este viernes 27 de junio se conmemoró el Día Mundial de la Microbiota Intestinal.

Este viernes 27 de junio se conmemoró el Día Mundial de la Microbiota Intestinal.

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Cada vez más investigaciones confirman el papel fundamental que cumple la microbiota intestinal en la salud integral, especialmente en la infancia. Mucho más que un sistema digestivo eficiente, el intestino alberga un ecosistema de microbios que influye en el crecimiento, el metabolismo, la inmunidad y hasta el desarrollo neurológico de los más chicos.

En el marco del Día de la Microbiota -que se conmemora el 27 de junio-, desde PROFENI (Profesionales Expertos en Nutrición Infantil) destacaron la importancia de prestar atención a este "órgano invisible" desde los primeros días de vida. Su modulación a través de hábitos saludables puede ser determinante para prevenir enfermedades crónicas y promover trayectorias de salud sostenibles a largo plazo.

Microbioma infantil: cómo se forma y por qué es tan decisivo

La microbiota se empieza a formar desde el nacimiento, con una composición influida por factores como el tipo de parto, la lactancia, la alimentación y el entorno.

Entre los beneficios de una microbiota equilibrada se destacan la mejor absorción de nutrientes clave para el desarrollo, la maduración del sistema inmunológico, la producción de hormonas de crecimiento y neurotransmisores, y la prevención de retrasos vinculados a la malnutrición.

Gabriel Vinderola, doctor en Química e investigador del CONICET en el INLAIN, subraya que este ecosistema actúa como un organismo vivo y dinámico: "Entendemos que podría ayudarnos en contextos de escasez alimentaria, pero también puede jugarnos en contra cuando nuestra dieta es pobre en calidad nutricional".

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Cuidar la microbiota desde la infancia -cuando la alimentación cumple un rol preponderante- contribuye a un desarrollo saludable y reduce el riesgo de enfermedades crónicas en el futuro.

Cuidar la microbiota desde la infancia -cuando la alimentación cumple un rol preponderante- contribuye a un desarrollo saludable y reduce el riesgo de enfermedades crónicas en el futuro.

Cuidados clave desde el inicio

Especialistas de PROFENI recomiendan una serie de estrategias que impactan positivamente en la salud intestinal infantil:

  • Priorizar el parto vaginal cuando sea posible, que permite la transmisión de bacterias beneficiosas.
  • Fomentar la lactancia materna exclusiva los primeros seis meses.
  • Evitar el uso innecesario de antibióticos, que alteran la diversidad microbiana.
  • Promover una alimentación rica en fibra con frutas, verduras y cereales integrales.
  • Incluir alimentos fermentados, como yogures con probióticos.
  • Reducir el consumo de productos ultraprocesados.
  • Incentivar el juego al aire libre y el contacto con la naturaleza.
  • Asegurar ambientes libres de humo y contaminantes.

Christian Boggio Marzet, gastroenterólogo pediatra y director de la Maestría en Gastroenterología de la Universidad del Salvador, sintetiza: “Una microbiota diversa y equilibrada es esencial para la salud digestiva, inmunológica, emocional y metabólica de los niños”.

La microbiota como reguladora metabólica y emocional

Estudios recientes destacan también el vínculo entre ciertas configuraciones microbianas y el llamado microbioma ahorrador, que favorece una mayor absorción energética. Esta eficiencia, beneficiosa en contextos de escasez, puede convertirse en un problema en sociedades con fácil acceso a alimentos hipercalóricos, contribuyendo al desarrollo de sobrepeso, resistencia a la insulina o hipertensión desde edades tempranas.

Además, las diferencias en la composición del microbioma podrían explicar por qué algunas personas desarrollan enfermedades metabólicas en condiciones similares a otras que no presentan complicaciones. Esto refuerza la necesidad de políticas de prevención desde la niñez.

Invertir en salud intestinal es invertir en futuro

La microbiota infantil no solo impacta en el presente, sino que establece las bases para la salud del adulto. Como sostienen desde PROFENI, “fortalecer el microbioma desde la infancia es una oportunidad única para sembrar bienestar a largo plazo”.

Cuidar lo que comen los niños, su exposición al ambiente y los hábitos diarios es, hoy más que nunca, una estrategia preventiva poderosa que puede cambiar su salud de por vida.