La vuelta del tren de pasajeros a los destinos turísticos, en especial a pueblos y parajes, ha tenido un gran recibimiento entre los viajeros que disfrutan de viajar tranquilos, de manera más lenta, disfrutando de los paisajes y de la calidez de la gente que los recibe en cada lugar donde paran los vagones. Desde este verano, es posible recorrer las Sierras de Córdoba y sus maravillas a través de rieles.

La provincia de Córdoba se caracteriza por sus paisajes serranos, ríos, arroyos, playas, cascadas y lagos. Es un destino que se asocia a pleno con las actividades al aire libre, la gastronomía típica y las actividades culturales. Esta es una alternativa para vivir una escapada única en suelo cordobés y a un precio accesible.

El Tren de las Sierras permite recorrer parajes, pueblos y ciudades del área serrana a muy bajo precio. El valor de los pasajes varía según el tramo que se escoja y la estación a la cual se arribe, para llegar a Casa Grande o Valle Hermoso el costo es de $50. Desde el jueves pasado cuenta con ocho servicios semanales y realiza trayectos de ida y vuelta. Los pasajes se adquieren en la página web oficial de Trenes argentinos del Ministerio de Transporte de la Nación.

Un recorrido con el Tren de las Sierras

Quienes disfrutan del slow travel o viajes lentos, esta opción es perfecta. El tren se desplaza por los rieles a muy poca velocidad permitiendo a los pasajeros captar en detalle el paisaje que se asoma por sus ventanillas. Esta excursión contribuye a afianzar una sensación de cambio de ritmo y de desconexión.

La aventura comienza en la Estación de Ferrocarril General Belgrano del barrio Alta Córdoba, de la Ciudad de Córdoba. Finaliza en la localidad de Valle Hermoso, 60 km al noreste del punto de partida.

Los coches son nuevos y seguros. Tiene aire acondicionado y amplios ventanales. El viaje se extiende en total por más de 3 horas a lo largo de 19 paradas.

Las estaciones imperdibles

San Roque

El tren se detiene en la localidad de San Roque, que rodea el dique homónimo, en el que se practican deportes náuticos. Alrededor se encuentra el mirador Plaza Federal, donde flamean banderas de todas las provincias. Este espacio tiene una explanada con bancos y fuentes decorativas. Las panorámicas abarcan la ciudad de Villa Carlos Paz y las sierras en todo su esplendor. 

Santa María de Punilla

Santa María de Punilla es otra parada que conjuga rincones verdes e hitos históricos. El cauce del río Cosquín surca el pueblo dando lugar a playas y espacios de recreación para toda la familia, por caso el Balneario Municipal.

Entre sus construcciones emblemáticas se encuentra la Estancia y el Molino El Rosario. A la par, el dique Las Higueritas aporta belleza natural, mientras que el Camino de las Maravillas permite llegar hasta la reserva Cueva de los Pajaritos.

La Calera

La Calera es una comuna serrana que se presta para descubrir en clave histórica. El pueblo cuenta con sitios tradicionales como la Capilla Vieja y el Molino Doble, que datan del siglo 18.

Otro de sus sitios de interés es el Museo de la Cal, que se ubica frente a la propia estación. Se le suma el Hotel Parque, primer hotel turístico de toda la provincia. Un imperdible para disfrutar de actividades al aire libre es Laguna Azul, un espejo de agua donde es posible practicar diversos deportes acuáticos, como wakeboard.

Cosquín

Cosquín es otro de los destinos diferenciales a los que arriba el Tren de las Sierras. El río que da nombre a la ciudad y el cerro Pan de Azúcar son los más característicos del lugar, en su geografía dibujan senderos y playas serenas.

Cada enero, Cosquín se convierte en la sede del Festival Nacional de Folclore, una de las celebraciones más representativas del país. Y en febrero llega el Cosquín rock, en ambas fiestas, artistas de toda la Argentina llegan a las sierras para mantener viva esta tradición.

Valle Hermoso

Valle Hermoso es la última parada de esta excursión ferroviaria. Se trata de un pueblo caracterizado por diversos paisajes de ríos, arroyos, cascadas y playas donde prevalece el aire puro y la calma.

En el río San Francisco es posible disfrutar de balnearios. En tanto, la Reserva Natural Vaquerías ofrece opciones de caminata en torno a puntos distintivos como el cerro de La Cruz y las cascadas “Del Ángel” y “De los Helechos”.

Además, este destino ofrece opciones para toda la familia, como el Paseo con Ciencia que permite aprender sobre física, astronomía y botánica en clave lúdica, mientras que el Museo Capitán Juan de Zeballos expone sobre arqueología y paleontología.

Aquí se encuentra también el curioso Castillo Hotel Fabrega y la Gruta de Santa Teresa.