Pampita sorprende entre las viñas con un accesorio que muchos critican

Sin anuncios ni demasiados preparativos, Carolina Pampita Ardohain, su esposo Roberto García Moritán y la pequeña hija de ambos, Anita, disfrutaron de unos días de descanso en "la tierra del sol y del buen vino".

La pareja y la pequeña niña llegaron a Mendoza y se instalaron en el Valle de Uco, donde disfrutaron de la hospitalidad de una bodega y mostraron los pormenores de las alternativas que la casa vitivinícola ofrece.

Paseando entre viñedos, Pampita probó vinos y mostró la belleza de esta zona mendocina, caracterizada por la producción de vinos de altura.

El empresario gastronómico Roberto García Moritán, esposo de Pampita, fue de la partida. El hombre de Republicanos Unidos tiene el perfil cada vez más alto en las noticias y las redes sociales, y se ha transformado en todo un referente de esa partido político. Sin embargo, estos días dejó su agenda tumultuosa de lado y acompañó a su esposa e hija.

"Fin de semana en Mendoza", escribió el político en su red social Instagram, posteando algunas fotos en las que se lo ve relajado junto a Carolina y la pequeña.

Por otro lado, Pampita -quien está ahora metida de lleno en la conducción de la segunda edición de "El hotel de los famosos"- eligió un vestido blanco y un par de simples ojotas para recorrer tanto los jardines y las viñas como el interior de la bodega.

Sobre todo las ojotas de Pampita causaron sensación, pues mientras muchos fashionistas y opinólogos del mundo de la moda las critican y dicen que es solo un accesorio que debe usarse en casa, la modelo y presentadora las elige y más de una vez las integra a su look, en este caso totalmente relajado y canchero. 

Mientras varios críticos de la moda descalifican looks y sostienen que es "un quemo" ir a algún lado con ojotas, Pampita las bancó y en sus fotos mostró que con un atuendo decontracté van a la perfección.