Cómo cultivar pomelos en macetas y qué cuidados debés tener
El pomelo es uno de los frutales más grandes del mundo y tiene una corteza lisa o rugosa. Se recomienda como parte fundamental de una dieta rica y nutritiva, y se puede consumir como fruta o en forma de jugo natural. En la cocina también se agrega como complemento para la cocción de carnes ya que le aporta un sabor ácido y amargo muy particular.
¿Cuáles son los beneficios del pomelo?
- Es un antioxidante natural
- Es una potente fuente de vitamina A y C
- Posee propiedades antisépticas
- Es una fruta muy saludable para el corazón y el sistema circulatorio
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Pasos a seguir para cultivar tus pomelos en maceta
Paso 1: conseguir la semilla y procesarla para sembrar
Para ello debes hacer lo siguiente:
1- Extraer la semilla del pomelo, lavarla y quitarle todo el resto de la pulpa que pueda quedar a su alrededor para evitar que desarrolle algún tipo de hongo.
2- Tomar una servilleta de cocina y con un rociador humedecer bien tanto la superficie como la base de la servilleta.
3- Depositar entre 5 a 8 semillas de pomelo entre los pliegues de la servilleta y dejarla en una bolsa de polipropileno al menos por 3 semanas, con poca luz y controlando cada 5 días. También hay que asegurarse de que esté húmeda, y en caso de encontrar sequedad volver a rociar con agua la servilleta.
4- Luego de 20 días, revisar si las semillas han roto su cáscara externa y si empezaron a asomar unos pequeños brotes. De ser así, la raíz comenzará a abrir paso, y una vez que hayan desarrollado dicha parte hay que buscar el contenedor para que allí realice el proceso de desarrollo.
Paso 2: cultivar la maceta
Para ello debes seguir el siguiente camino:
1- Sembrar de la semilla. Una vez conseguido un grupo de semillas óptimas con sus respectivos brotes, buscar una maceta con orificios para asegurar que tenga buen drenaje de agua.
2- Encontrar un sitio apropiado en la casa para colocar el recipiente. Para ello hay que tener en cuenta que la planta de pomelo puede desarrollarse en un tamaño que va entre mediano a grande, y que además necesita buena luz natural y varias horas de sol.
Paso 3: depositar la semilla en la maceta
1- Una vez preparada la tierra en la maceta, depositar las semillas a poca profundidad. Lo ideal es hacer un pequeño agujero con el dedo que no pase los 3 centímetros. Allí se debe introducir la semilla con la pequeña raíz hacia abajo, y luego hay que realizar un riego leve para humedecer la tierra y no saturarla.
2- Cuando la planta comience a crecer con el tallo y algunas hojas, mantener la maceta en un lugar cálido evitando noches frías. Es importante intentar que reciba la luz del sol por la mañana, pero siempre cuidando que los rayos de la tarde no afecten a la planta ya que su intensidad puede quemar las hojas.
Recuerda: la planta de pomelo, como todo cítrico, prefiere un ambiente cálido y moderado. Cuanta más luz solar reciba, las floraciones serán más vivas y brillantes, por lo que si la planta está a la sombra las flores serán apagadas y débiles.