Qué le pasa a tu cuerpo cuando llevas tiempo sin sexo
La falta de sexo repercute en tu salud emocional y física.
Cuando llevamos tiempo sin mantener relaciones sexuales, nuestro cuerpo comienza a experimentar una serie de cambios que pueden afectar nuestra salud física y emocional. En las mujeres, la falta de actividad sexual puede llevar a una disminución en la lubricación vaginal. Esto puede hacer que el acto sexual sea incómodo o doloroso, lo que a su vez puede disminuir el deseo sexual y dificultar aún más la intimidad con la pareja.
La falta de sexo también puede provocar dolor en el área genital, especialmente en las mujeres. La falta de actividad sexual puede hacer que los músculos del suelo pélvico se debiliten, lo que puede causar molestias durante el coito o incluso fuera de él.
En los hombres, la falta de sexo podría dar paso a la disfunción eréctil. La erección es un proceso complejo que involucra tanto factores físicos como psicológicos, por lo que la falta de estimulación sexual regular puede afectar negativamente la capacidad del hombre para mantener una erección.
El sexo también tiene beneficios para el sistema inmunológico, ya que ayuda a fortalecer nuestras defensas contra enfermedades e infecciones. Por lo tanto, la falta de actividad sexual puede hacer que nuestro sistema inmunológico se debilite, lo que nos hace más susceptibles a enfermedades y virus.
Además, el sexo desencadena la liberación de hormonas como la oxitocina y la dopamina, que están asociadas con el bienestar emocional y el placer. Cuando no mantenemos relaciones sexuales con regularidad, nuestra producción hormonal puede disminuir, lo que puede afectar nuestro estado de ánimo y nuestra salud mental en general.