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YPF confirmó otro pozo en la lengua mendocina de Vaca Muerta y presionan para adelantar la inversión

YPF confirmó un pozo adicional a los dos ya comprometidos. La fecha límite para ejecutarlos es 2028, pero buscan que se anticipe. Las limitaciones y oportunidades.

El desarrollo de Vaca Muerta en Mendoza es incipiente. 

El desarrollo de Vaca Muerta en Mendoza es incipiente. 

Archivo MDZ

El presidente de YPF, Horacio Marín, no usa muchos eufemismos para decir y hacer. Por eso, por ejemplo, apuró la política de desinversión en las áreas petroleras maduras que no eran rentables y ejecutó un plan agresivo para deshacerse de esos activos, algo que la petrolera estatal tenía en carpeta mucho antes pero no se hacía por temor a las repercusiones. Ese dato conceptual es importante para darle relevancia a un indicador para el futuro mediato: YPF no abandonó y anunció más inversión a futuro en la lengua mendocina de Vaca Muerta. Es decir, en medio del plan de reconversión de inversiones de YPF, Mendoza mantiene una cuota de expectativa hacia los próximos años, en un contexto adverso.

La petrolera estatal tiene comprometidas inversiones para ejecutar dos pozos horizontales en el área CN VII, en lo que sería su segundo paso en la exploración no convencional en Mendoza. Pero de manera voluntaria agregó otro pozo vertical. En base a los datos que la empresa y el Estado mendocino acumula, hay buenas perspectivas a futuro. “Hay muchos datos porque incluso en la explotación convencional ya se había llegado a Vaca Muerta”, explicó a MDZ Lucas Erio, director de Hidrocarburos de la provincia. Esas inversiones no son inmediatas. El compromiso de YPF tiene fecha de vencimiento en 2028 y lo ocurrido este año no fue bueno, pues pasó sin inversiones reales nuevas sobre el terreno. Sí se avanzó en las tareas de “laboratorio” que permitieron comprometer más trabajos a futuro. YPF comenzó el proceso de evaluación ambiental para ejecutar los nuevos pozos, que ahora serán tres.

el quemado parque solar alfredo cornejo horacio marin (60)
Horacio Marín, presidente y CEO de YPF, recorrió junto al gobernador Alfredo Cornejo el parque solar El Quemado.

Horacio Marín, presidente y CEO de YPF, recorrió junto al gobernador Alfredo Cornejo el parque solar El Quemado.

YPF hizo la primera exploración no convencional en la lengua mendocina de Vaca Muerta en 2024. Fueron dos pozos, con resultados disímiles entre ambos, pero con datos alentadores. En el pozo de Paso de las Bardas Norte se producen 30m3 de petróleo y en CN VII 47 metros cúbicos por día, con un dato novedoso: más de 64 mil m3 de gas, una novedad para Mendoza.

En detalle

La intención del gobierno de Alfredo Cornejo es adelantar los trabajos de YPF para el año que viene. Marín es poco permeable a las presiones políticas, pero más “accesible” a través de los beneficios económicos. Mendoza corre con desventaja por los problemas logísticos para avanzar en Vaca Muerta y la competencia con Neuquén, que es la "estrella" en el sector.

Los beneficios que pueda ofrecer el Estado local para facilitar las inversiones pueden ser una variable de ajuste. Antes, por ejemplo, que se concreten las inversiones dependerá de la disponibilidad de equipos de perforación y toda la logística que demanda la fractura hidráulica y “avanzar” hacia la roca madre. La alta demanda de Neuquén complica que se tenga en cuenta a zonas por ahora marginales como las de Mendoza.

vaca muerta en Mendoza 2

El resultado de los trabajos de YPF son esperados más allá de esa compañía. Detrás hay al menos dos proyectos para avanzar en la exploración y explotación no convencional en áreas vecinas a CN VII. Se trata de Cañadón Amarillo, de la UTE Quintana Energy y TSB, que en 2027 haría fracking con una inversión prometida de 24 millones de dólares. Y lo que puada hacer Tango, heredera de Aconcagua, en Payún Oeste, una concesión convencional con potencial no convencional.

Los movimientos en la industria petrolera siguen. YPF, por ejemplo, está en proceso de retiro de las últimas áreas convencionales que le quedaban en Mendoza. Ese proceso, similar al realizado con el plan Andes, es complejo porque hay concesiones en marcha. Es decir, son áreas en producción. La más atractiva es Chachahuén, donde se realiza recuperación terciaria, un sistema en el que se inyectan polímeros a los pozos para que “arrastren” el petróleo que no puede ser bombeado por los métodos tradicionales. Los resultados fueron muy buenos, pero es un área con alta demanda de inversión y seguimiento. Allí, además, la petrolera estatal tiene como socios a dos empresas mendocinas que originalmente triangularon la propiedad: Ketsal-Kilwer, de José Luis Manzano, y Energía Mendocina, del grupo Álvarez. Ellos tenían preferencia para ofertar, pero todo indica que habrá un nuevo operador.

El 2025 terminará con una caída en la producción por el declino que hubo en la actividad convencional, la transición por la salida de YPF y la "cosecha" por el pasado de poca inversión en exploración.