Granos y divisas: cuál es la expectativa del campo para otro año complicado

Con la finalización de la cosecha de trigo y el inicio de la de girasol, el campo ya ha comenzado a sacar sus cuentas, no solo para esta temporada sino también de cara a la cosecha gruesa que ya viene. Aunque tanto el sector como el Gobierno se ilusionaban con el ingreso de divisas hacia mediados de año, cuando luego de la soja finaliza -en julio- la cosecha de maíz, la realidad se avizora diferente. A esto se suma la posibilidad de que las retenciones no se eliminen como se había acordado antes de la caída de la ley ómnibus, por lo que se han encendido las alertas.

En el marco de los festejos vendimiales, el presidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Elbio Laucirica, comentó que esta situación se suma a un campo que venía golpeado. Tanto porque casi todas las economías regionales están en rojo en el semáforo que esta entidad realiza mensualmente, como debido a que la zona núcleo no ha recibido las lluvias esperadas y pronosticadas.

Así, hay zonas que continúan complicadas por las sequías, otras que mejoraron y recibieron lluvias y varias que se quedaron a mitad de camino. De este modo, los rindes han sido diversos en las distintas regiones.

Al combo hay que sumarle la caída de los precios internacionales que vienen en baja, con pocas perspectivas de suba. "Los rindes han sido menores por lo que no vamos a tener los ingresos de divisas esperados", subrayó Laucirica. También comentó que la expectativa generada por la devaluación de diciembre y la posibilidad de una mejor cosecha no se cumplirá. Situación que se suma al incremento de costos de la mano del impuesto PAIS (17,5%) y de los insumos dolarizados. "Esto, sumado a la baja de precios, hace que hoy el margen sea negativo", apuntó el dirigente de Coninagro.

La situación no solo impacta a nivel país este año dado que habrá menos divisas de las esperadas este año, sino que también empieza a reconfigurar la cantidad de dólares y la cosecha de 2025. Es que ante las dudas de que las retenciones se vuelvan a instalar, así como de lo que pueda suceder con los precios internacionales, el campo debe realizar sus números para determinar su apuesta para la próxima cosecha. Entre otras cosas, tiene que ver con mejorar el paquete tecnológico, utilizar productos para mejorar rindes e inversiones específicas con el objetivo de recuperarlas.

El fantasma de las retenciones

"Ante esta situación de clima y precios internacionales que nadie maneja ni previó, buscamos trabajar con el Gobierno para ver qué medidas se pueden tomar para lograr una situación beneficiosa para todos", comentó Laucirica. Con una inflación galopante, precios dolarizados, aunque no se exporte y una devaluación que ha comenzado a quedar corta, desde Coninagro expresaron que el gran desafío que hoy tiene el Gobierno es evitar un nuevo atraso cambiario. Es decir, que la devaluación no sea absorbida por la inflación.

En este marco, el fantasma de las retenciones sobrevuela las decisiones de inversión e incrementa la incertidumbre. Es que al caerse el paquete fiscal en el Congreso, los productores temen que lo conversado sobre este tema vuelva para atrás. "Esto es una de las mayores inquietudes que tenemos en este momento", reconoció el presidente de Coninagro.

El dirigente también aclaró que las primeras medidas tomadas por el gobierno de Javier Milei han respondido algunas de las necesidades que el sector reclamaba desde hacía tiempo. Entre ellos, el proceso de desregulación y la quita de cupos de exportación como primeros pasos auspiciosos. Sin embargo, la posibilidad de que las necesidades fiscales hagan regresar los derechos de exportación es algo que preocupa.

Si bien desde Coninagro están conformes con lo que denominan una discusión ganada y demostrada de que las retenciones van en contra de los objetivos de crecimiento de la economía, creen que podrían volver este año.

"Los legisladores en el Congreso y también el Gobierno entendieron que el derecho de exportación es contraproducente porque es un impuesto regresivo", expresó Laucirica. En este marco, agregó que desde la Nación han prometido quitarlas en algún momento, pero recién cuando las condiciones de "caja" lo permitan. "Ellos nos piden un año, pero nosotros queremos que las quiten ahora", destacó el referente de Coninagro. Y agregó que el sector precisa previsibilidad: "Que nos digan cuál va a ser la política fiscal, tributaria y qué harán con las retenciones, para nosotros poder diseñar nuestras próximas inversiones", explicó Laucirica.