Partida por partida: de dónde sale la plata del ajuste de US$ 30.000 millones
El paquete que incluye suba de impuestos, blanqueo y recorte de gastos suma en total un 5,7% del Producto Bruto Interno.
Más allá de los trazos gruesos del anuncio del ministro de Economía, Luis Caputo, queda por ver la instrumentación de cada una de las medidas económicas. No obstante, desde la cartera dieron a conocer el esquema de ajuste fiscal que incluirá un recorte al gasto del 3,5 del Producto Bruto Interno (PBI) y un paquete de ingresos vía suba de impuestos y blanqueo que representa un 2,2%, redondeando un total de 5,7%.
Si se toma en cuenta que el PBI en 2022 fue de aproximadamente US$ 632.000, se debe calcular cada punto del PBI en US$ 6320 millones, aunque para este año se espera una caída general del producto bruto.
Según el Palacio de Hacienda, la ecuación discal cerrará a partir del siguiente esquema, que en su primer apartado va por el lado de nuevos ingresos. Son:
-Una suba del impuesto PAIS: pasará del de 7,5 al 17,5 por ciento la alícuota del impuesto PAIS en el caso de las compras en el exterior o en el país de servicios de fletes y transportes para importación y exportación de bienes, e importación de mercaderías no eximidas del impuesto, siempre que no se trate de bienes suntuarios. Lo mismo sucede para los servicios digitales, como las plataformas de streaming.
Según los cálculos, el monto a recaudar será del 0,8% del PBI. Este anuncio fue el complemento de la devaluación del 45% del peso que llevó al dólar oficial de $380 a $800 en una jornada.
-Retenciones adicionales: Se anunció que subirán las retenciones de todos los productos al 15%, menos la soja que seguirá en el 33%. En total se buscará recaudar un 0,5% más, es decir, algo más de US$ 3000 millones. Este cambio necesitará de la aprobación del Congreso por tratarse de una modificación impositiva.
-Reforma de Ganancias: Es otro tema que necesitará de una ley del Congreso de la Nación y busca revertir la ley que hizo aprobar Sergio Massa sobre la eliminación del impuesto a las Ganancias de la cuarta categoría. De esta forma se prevé recaudar un 0,4% más.
-Proyectos de blanqueo, Bienes Personales, y moratoria: También necesitará del apoyo legislativo. Se buscará sumar un 0,5% del PBI en ingresos adicionales.
En el ítem ajuste fiscal también se necesitará en algunos casos de apoyo de diputados y senadores, aunque la mayor parte del paquete de reducción del gasto sólo precisarán de la decisión políticas de los funcionarios a cargo.
-Bajará en jubilaciones y pensiones: Este punto será el más controvertido. Aunque no hay ningún proyecto en danza, el Gobierno intentará modificar la ley de actualización del haber jubilatorio por alguna fórmula alternativa. Buscarán un ahorro del 0,4% del PBI.
-Ajuste de transferencias a provincias: En total llegaron al 0,7% del PBI en los últimos años, pero Gobierno espera reducirlas al 0,2% y eliminar gasto por un 0,5% del PBI.
-Subsidios económicos: En este ítem se incluyen subsidios a la energía y al transporte. Según el vocero presidencial, Manuel Adorni, la idea es mantener algunos de ellos, pero poniendo foco en asistir a la demanda y no ya a la oferta. La perspectiva es comenzar con el esquema de reducción en el mes de enero y así lograr un ahorro del 0,7% del PBI.
-Gastos de capital (obras públicas): Será uno de los puntos más conflictivos. Implicará la paralización total de las obras llevadas adelante por el Poder Ejecutivo Nacional, con su consecuente impacto en la industria del sector con toda su cadena de valor y su nivel de empleo, además de generar rispideces con las provincias que cuentan con algunas de esas obras para sostener el nivel de actividad y mostrar acción política. La reducción del gasto que implicaría para 2024 será del 0,7% de PBI.
-Gastos de funcionamiento y otros: Este ítem incluye, además de la reducción de ministerios y cargos políticos, racionalización de gastos en todas las áreas y el fin de contratos de empleados del Estado. Se espera evitar la erogación de alrededor del 0,5%.
Programas sociales: Más allá del anuncio de aumentos en las asignaciones sociales del 100% y del 50%, se prevé la baja de numerosos beneficiarios. Fundamentalmente de aquellos que operan con "intermediarios". En este caso la reducción llegará al 0,7% en total.